Ponferrada señalizará a final de año los primeros iconos de la Ciudad del Dólar

Hay lugares que ya no existen, como el Cine Edesa. Como los edificios de la Minero al pie de la estación del ferrocarril a Villablino, que no resistieron el acecho de la especulación inmobiliaria. Pero otros siguen ahí y son el testigo de lo que hoy llamamos la Ciudad del Dólar, el nombre literario de aquella Ponferrada desigual de la posguerra que el Ayuntamiento quiere convertir ahora en una marca propia.

Tanto es así que el área de Patrimonio que dirige Iván Alonso, a partir de una proyecto del archivero y bibliotecario municipal Jesús Álvarez Courel, ya tiene una primera lista con una docena de edificios y conjuntos urbanísticos que señalizará mediante una serie de placas uniformes a finales de año. Una serie de letreros de dos tipos —para los edificios y para los conjuntos urbanos— que recordarán a los ponferradinos y explicarán a los visitantes la importancia que la ciudad le concede a inmuebles como el de la esquina de la plaza Lazúrtegui con el arranque de la avenida de La Puebla, donde hay más inmuebles escogidos, o a los poblados de la MSP y de Endesa.

Una Ponferrada, aquella Ciudad del Dólar que nació en la literatura, y que también tiene sus nombres propios, como el del arquitecto José Martínez Mirones, funcionario municipal que revisó el urbanismo de la época, el escritor e ingeniero Juan Benet, alojado en el Hotel Madrid —otro edificio histórico— donde dio forma al Bierzo de su novela Volverás a Región, o el del cantante Juanito Valderrama, toda una estrella en la posguera, que compuso en el mismo alojamiento su canción El emigrante.

Todos ellos tendrán también su protagonismo en el proyecto para poner en valor el patrimonio y la leyenda de la Ciudad del Dólar, explica Iván Alonso. Los 9.000 euros de la primera fase del proyecto, asegura, serán solo una primera inversión. Proteger esos edificios, esos conjuntos al señalizarlos, aunque no tengan una figura de protección, es otro de los objetivos del plan, que anima los propietarios a darles un uso a inmuebles que en algún caso están vacíos. Para que no les paso lo que al Edesa, o a los edificios de la Minero junto a las vías.

Junto a la conservación del patrimonio y la memoria de la Ciudad del Dólar, el proyecto del Ayuntamiento busca rentabilizar el pasado de Ponferrada. «Hacer del pasado, también una palanca para el futuro», explica el concejal Iván Alonso. Y eso implica la posibilidad no solo de organizar o impulsar la creación de una ruta turística y de visitas guiadas. También lograr que algunos de esos edificios vuelvan a tener vida y acojan nuevos servicios a partir de proyectos de la iniciativa privada.

«Ya me estoy reuniendo con personas, promotores, interesados en esta línea», añade el edil, que no quiere y no puede entrar en más detalles.

De concretarse, la Ciudad del Dólar, la de la fiebre del wólfram y del carbón, pasaría de la leyenda a la economía real.