Fin a unas fiestas masivas sin incidencias

Terminó la Encina y, de momento, no está el invierno encima, llevando la contraria al refrán de Ponferrada. Este lunes pasado lunes, día de la Encinina, fue jornada de acción de gracias y balances y habló el alcalde. Marco Morala dijo que, a falta de un balance más en profundidad, habían sido unas fiestas muy concurridas, en la que hubo muchas visitas de fuera, las calles estuvieron llenas, la gente disfrutó de los actos y lo más importante: todo sin incidencias destacables. En palabras del mandatario municipal, éstas del 2024 fueron «las mejores fiestas de la historia. Y para él, el desembolso realizado no ha sido un gasto, sino «una inversión en felicidad».

A la hora de encontrar fallos o detalles que no salieron como se preveía —como la crítica hecha desde la bancada socialista de la oposición sobre los fuegos artificiales encima de la casa consistorial el día del pregón— el regidor de Ponferrada echaba mano de lo anunciado en el último pleno y se mostraba conciliador y dispuesto a hablar con los responsables del PSOE para mejorar en lo que se considere necesario.

Lo más destacado por el alcalde fue la gran participación , con un programa diseñado para colmar los diferentes gustos de los vecinos, los musicales, los gastronómicos, culturales y sociales. Morala felicitó al concejal de Fiestas, Carlos Cortina, por «diseñar y ejecutar las mejores fiestas de la Encina de la historia».

«Hoy ponemos el colofón a unas fiestas en las que no ha habido gastos, sino que ha habido inversión en felicidad para todos y de todos los ponferradinos y bercianos, que es así la mejor forma de encarar, con el mejor ánimo posible este nuevo curso político, escolar y laboral. Porque ya todos sabemos que después de la Encina, todos a trabajar».

Sobre la petición de que estén todas las juntas vecinales en las próximas fiestas pedida por el concejal del PSOE, Olegario Ramón, el alcalde dijo que no sabe sin sin las de Ponferrada o las de todo el Bierzo, pero en cualquier caso, Marco Morala adelantó que habrá «mano tendida y diálogo». «Nos sentamos, escucharemos su propuesta y si es sensata y es realizable, pues porqué no. Sí, vamos a escucharlo».

El regidor remarcó que han sido unas fiestas marcadas por la absoluta normalidad, con incidentes que no pasan de ser los ordinarios ante tantas miles de personas que pasaron por la ciudad y acudieron a los numerosos actos programados durante esta última semana larga. «No hay grandes cosas que destacar en este tema de las incidencias. Ha habido una convivencia pacífica y magnífica entre todos los ponferradinos y bercianos , y los miles y miles que nos han acompañado», dijo Morala.

Decía ayer el alcalde que Ponferrada es una ciudad singular, que no se entiende sin sus barrios y pedanías, sus pueblos y el mundo rural. Por eso, en la jornada final festiva de la Encinina, el protagonismo era para ellos, con la idea según Marco Morala de «dimensionarlo y potenciarlo».

A mediodía, en la basílica de la Encina tuvo lugar el acto de acción de gracias por parte de la corporación municipal. Todo por unas fiestas que en palabras del máximo representante municipal de los ponferradinos «se han desarrollado muy bien, con éxito en todos los puntos y actos programados».

El alcalde se refirió a éxitos como el encuentro de peñas, la carrera de color, las grandes orquestas como La Misión y ayer noche el Combo Dominicano. «S puede mantener perfectamente este formato, pero nos sentaremos una vez que finalicen las fiestas, lo analizaremos con calma y desde luego tomaremos las decisiones que sean las mejores para Ponferrada», dijo.

Marco Morala recordó que hacía más de una década que no se llenaba el Auditorio con los grandes conciertos, en este caso con Melendi, «es un dato abrumador y definitivo». Aseguró que la ciudad estaba llena, en el ferial, las orquestas y la alta y centro.