Castropodame protestará en Ponferrada contra la planta de biogás
Los vecinos se concentrarán el próximo martes, día 8, frente a la delegación de la Junta de Castilla y León
Ya no son los vecinos, que también, sino el propio Ayuntamiento de Castropodame el que se ha puesto al frente de la protesta para tratar de impedir que el grupo Lamelas Viloria consiga sacar adelante su proyecto para implantar en el municipio una planta de biogás. Las casas más cercanas, en Villaverde de los Cestos, distarían poco más de 700 metros de las instalaciones y el trajín de camiones sería continuo por el medio de los pueblos. Por eso, ya hay fecha para la manifestación que, hace unos días, adelantaron que iban a llevar a cabo, después de sumarse a la protesta general celebrada en Valladolid para tratar de frenar cualquier autorización por parte de la Junta de Castilla y León. En El Bierzo, la protesta será el día 8.
«Por un municipio verde» es el lema de la convocatoria, que se celebrará frente a la delegación de la Administración autonómica en Ponferrada durante media hora, entre las 11.00 y las 11.30 horas del próximo martes. Los vecinos fueron los primeros en organizarse y, tras el último concejo público, también el Ayuntamiento y las juntas vecinales del municipio se han sumado para ponerse al frente la reivindicación. Aseguran defender la salud de los vecinos y del propio municipio y defiende que una planta de producción de biometano a partir de la digestión anaeróbica de residuos orgánicos no es el futuro anhelado.
La denuncia social por el desarrollo de este tipo de instalaciones es generalizada y todas las protestas coinciden en los mismos argumentos. Vecinos de hasta una decena de municipios de Castilla y León participaron en la manifestación celebrada en Valladolid hace tan solo unos días. Los de Castropodame acusan al promotor de querer «cazar subvenciones» a cuenta de sus recurso de haber ocultado la verdad sobre la actividad de la planta a los propietarios de los terrenos con quienes ha negociado la compra para tener suelo donde construirla.
«Estercolero», «aberración», «olores pestilentes» y «sacrificio» han sido algunos de los términos empleados por los vecinos de este municipio para referirse a ese proyecto empresarial que no generaría más de un par de empleos. «Tendríamos que convivir con pestilentes olores de basura orgánica, lagunas de estiércol y purines, lodos de depuradora, residuos de mataderos y de industrias alimentarias», denuncian los vecinos afectados.