¿Otro tocomocho?

Ahora, de un tiempo a esta parte surgen empresas de «no se sabe dónde» (de aquí también las hay) abanderados de la Transición Ecológica vendiéndonos que quieren relanzar la economía del Bierzo, creando riqueza y puestos de trabajo, instalando parques fotovoltaicos, parques eólicos y ya el colmo: una planta de biogás.

Sí, en el puto centro del Bierzo, entre Bembibre, Castropodame, Villaverde, Almázcara, San Miguel, Congosto, Cobrana y… Ponferrada, aquí mismito, quieren poner una “Planta de Biogás” para generar gas que sea “verde”, que sea ecológico ya que en España, en Europa y a nivel mundial se tiene que dejar de producir energía con combustibles fósiles, sobre todo el carbón; visto así, suena hasta bien…

Eso ya lo entendemos y hasta lo compartimos… lo que pasa es que aquí en nuestro Bierzo tenemos una experiencia sangrante, que estamos sufriendo y padeciendo. Todos los Bercianos de cierta edad hemos vivido los años de bonanza en que las minas de carbón generaban muchos puestos de trabajo, corría el dinero a manos llenas: en Fabero, Toreno, Matarrosa, Bembibre, en Torre, Igueña… ¡Claro! por su puesto en Ponferrada «La ciudad del dólar».

A partir de los años 90 aquella alegría y aquella bonanza empezó a decaer, a diluirse… precisamente porque en Europa y a nivel mundial el principal contaminante y el causante de la destrucción de la "capa de ozono" era el carbón. Todo lo relacionado con el carbón era malo, malísimo, comenzó así la cuesta abajo de los pueblos mineros de Ponferrada y del Bierzo. La suerte estaba echada pero nadie aquí en nuestra región la asumía ni lo quería admitir… Las empresas de extracción buscaron y consiguieron ayudas y subvenciones millonarias de la administración, “había que mantener aquellos puestos de trabajo” era la gran disculpa… pero aquel dinero solo sirvió para prolongar la agonía de una muerte que estaba anunciada… todo se fue acabando poco a poco.

Muchísima gente de la mina se marchó a vivir a sus lugares de origen o compraron pisos lejos de aquí, cosa que no es criticable, cada cual es muy dueño de elegir su futuro…. Lo que no es de recibo es que aquellas empresas que sacaron y esquilmaron la riqueza de las entrañas del Bierzo no hayan jamás invertido ni una sola peseta en algún proyecto productivo que, de alguna manera, compensara o paliase aquella ruina que se veía venir… Lo que sí quedó, fue el abandono inmisericorde de todos, y digo de todos los edificios e instalaciones que albergaron aquellas minas; quedaron escombreras, muchas escombreras, repartidas por todo el Bierzo, quedó, hablando en plata: deterioro, basura y feísimo…

Por cierto: Ahora la administración está tapando y arreglando en lo posible aquel deterioro tan brutal que sufrimos y aguantamos… pero ¡ah! eso sí, con el dinero de todos, el tuyo y el mío... Aquellas empresas causantes ahora se lavan las manos, «se van de rositas» Decía D. Miguel de Cervantes «Fuese y no hubo más.» Una planta de Biogás lo que va a traer a nuestro paisaje son muchísimas toneladas de residuos orgánicos y de todo tipo… Seremos el vertedero de desechos de toda la Comunidad, así de claro y así de nítido. Que nadie nos engañe, esas empresas con sus proyectos no nos van a solucionar nada, viene a coger las subvenciones de Europa, viene aquí porque en las ciudades no los quieren cerca y además… piensan que en el Bierzo nadie va a oponerse, son fáciles de convencer ya que hasta ahora se aguantó con todo. Lo más sangrante es que no traen empleo o el que traigan se irá cuando se acabe la subvención. Traerán una macroplanta que va a acabar destruyendo el paisaje que gracias a dios aún tenemos, y eso es lo que no podemos consentir. El conservar la esencia de nuestro hábitat, de nuestra tierra, es la mejor y la más rentable inversión del futuro del Bierzo y por ende de León.