Ponferrada aumenta su patrimonio

Devolver a la locomotora 51 el aspecto que debió tener a comienzos de los años veinte cuando entró en servicio en el ferrocarril de la MSP no fue una tarea sencilla. Los talleres Mecalper de Carracedelo, el «quirófano» donde han sido recuperadas todas las máquinas que ahora expone el museo ponferradino, precisaron alrededor de tres años para completar la restauración. La inversión que ha sido realizada en el acondicionamiento ronda los 33.000 euros (alrededor de 5,5 millones de pesetas). Con su entrada, el Museo de Ponferrada expone ya siete máquinas dignamente restauradas y en breve espera incorporar a no muy largo plazo la número 18 que se encuentra en la estación de Cubillos. La 51 es la primera locomotora de vía ancha que incorpora el museo. La MSP tuvo cinco locomotoras de vapor de vía ancha numeradas de la 51 a la 55 para hacer maniobras en los cargaderos de mineral de hierro de San Miguel de las Dueñas y para maniobras en Ponferrada. La 51 fue encargada al constructor belga Haine Saint Pierre. Una de sus particularidades es la de haber sido una de las escasísimas «pannier tank» que ha habido en España, es decir una máquina con tanques de agua laterales que no llegaban hasta el tablero. La MSP la puso en servicio en 1922 y la retiró hacia 1984 al finalizar el transbordo de carbón del ferrocarril entre Ponferrada y Villablino. A la entrega de la nueva locomotora asistió el concejal de Cultura, Manuel Rodríguez, que se felicitó con la nueva incorporación y destacó la actividad de los dos museos que actualmente funcionan en Ponferrada, a los que en breve se unirán otros dos más. «Confiamos en que pronto podamos decir que Ponferrada es una ciudad de los museos. Se empezó prácticamente de cero y ahora están abiertos el Museo del Bierzo y el del Ferrocarril y próximamente se inaugurarán el Museo de la Radio y el de las Cofradías de Ponferrada. Además, esperamos que algún día se inaugure el de arte sacro de la basílica de la Encina», manifestó Rodríguez.