El parricida frustado compareció en el juzgado
«Me arrepiento», dice el joven que intentó matar a su padre en Otero
Por el juzgado de Ponferrada pasó ayer el vecino de Otero de Naraguantes (Fabero) acusado de un homicidio frustrado, al golpear a su padre en la cabeza cuando se disponía en su domocilio a encender
Era mediodía y el presunto parricida de Otero de Naraguantes tenía ayer cita con la médico forense en los Juzgados de Ponferrada. Querían hacerle un examen médico y psicológico sobre su situación física y mental. Querían también conocer los motivos que llevaron presuntamente a Miguel Ángel Moral a golpear brutalmente a su padre, Gregorio Moral, jubilado de más de 70 años, quien permanece ingresado en un hospitalario de León recuperandose del impacto sufrido en la cabeza. En un momento, en el que el supuesto agresor se encontraba esperando para entrar con la forense, hizo una confesión pública significativa. «Sé que le di en la cabeza», expresó al preguntarle por lo sucedido. Un tanto nervioso, con palabras entrecortadas, tartamudeando, la misma persona confesó estar arrepentida de lo que presuntamente había hecho. Al mismo tiempo añadía como respuesta a las preguntas que se le hacían, que en parte sí había sido consciente del daño que había ocasionado a su padre, aunque también ponía en duda estar en sus plenas facultades mentales. El joven presentaba un aspecto un tanto desaliñado. Iba calzado con unas zapatillas deportivas blancas, pantalón vaquero y cazadora deportiva sobre una sudadera de color blanco y roja. En la frente llevaba una herida. Los últimos días los ha pasado en los calabozos que la Policía Municipal tiene en el consistorio de Ponferrada, y ayer pasó a disposición judicial.