La pedanía de Villadepalos pide a Confederación que investigue destrozos y ocupación ilegal de fincas
La empresa ACS, denunciada por daños al construir la depuradora
La constructora ACS, adjudicataria del colector principal que conducirá los vertidos residuales de Ponferrada y su contorno a la futura estació
El proyecto de depuración de aguas residuales en el cauce del Sil a su paso por Ponferrada y en los municipios del contorno está presupuestado en casi 30 millones de euros. Las obras se iniciaron el mes pasado y fue el propio ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, el encargado de poner la primera piedra de la estación depuradora que se localizará en Villadepalos (Carracedelo). Desde entonces, los vecinos de este pueblo han ido destilando con cuentagotas quejas por la ejecución de los trabajos. Sobre todo en lo que toca al colector general de Sil, que acomete la constructora ACS. Contra esta empresa, en exclusiva, va dirigida la denuncia presentada el pasado viernes ante la Confederación Hidrográfica del Norte por la Junta Vecinal. La representación del vecindario llama la atención en primer lugar sobre los destrozos en los cauces de riego, que se temen que no puedan estar restablecidos antes del mes de abril cuando su integridad es vital para el cultivo de las fincas. Además, en la denuncia se apunta también a la existencia de desperfectos importantes en los pasos agrícolas, que en muchos casos están haciendo imposible el acceso de los propietarios a sus explotaciones. «Viales principales en la zona, como el camino vecinal de Villadepalos a Villaverde», se recoge en el escrito de la denuncia, «han sido inutilizados para los particulares, debido a que las roderas de los camiones y la maquinaria pesada no permiten su uso». Al margen del deterioro de las infraestructuras básicas en un ámbito en el que la agricultura tiene tanto peso en la economía de la población, la pedanía que dirige Luis Gago, se hace eco asimismo de los lamentos de algunos titulares de suelo que consideran que se ha ocupado por parte de la constructora sin estar afectados por los pertinentes expedientes de expropiación. En algunos casos, incluso, se alude a la eliminación de vallados y de superficies arboladas. Los vecinos lamentan que desde el verano hasta el momento no se hayan habilitado vías accesorias para facilitar el tránsito de las personas y de los vehículos particulares, lo que evitaría las situaciones de riesgo que se producen a diario relacionadas con la actividad de la maquinaria pesada de la adjudicataria. La Junta Vecinal espera que los técnicos de la Confederación llamen al orden a la constructora. De lo contrario, prometen sus responsables, «nos veremos en la obligación de denunciar estos atropellos por otros cauces legales».