Voluntarios del quirófano

Nuestra imagen nos preocupa cada vez más. Gozar de un buen aspecto externo nos priva y por eso cuando la naturaleza no ha sido excesivamente benévola al tallar alguno de nuestros rasgos físicos o bien cuando el paso del tiempo comienza a dejar su huella, pasar por el quirófano es la solución a la que recurren cada vez más hombres y mujeres de la comarca. Son los voluntarios del quirófano. Desde que el pasado mes de diciembre la doctora Mari Paz Artigues, especialista en cirugía plástica, estética y reparadora, comenzase a pasar consulta en el Hospital de la Reina de Ponferrada, el número de pacientes ha ido creciendo de forma constante. A diario tiene como mínimo una docena de consultas. Hombres y mujeres jóvenes, también de edad madura o ya bastante mayores acuden allí para rejuvenecerse o simplemente quedar más guapos. Las intervenciones que más demandan los hombres son injertos de pelo para combatir la caída del cabello y las operaciones para mejorar la nariz (rinoplastia), poner remedio a las denominadas orejas de soplillo o rejuvenecer los párpados. El coste de una intervención de injerto de pelo puede oscilar entre los 2.000 y los 2.500 euros. Dependiendo de lo avanzado de su calvicie, el paciente se someterá a una, dos, tres o incluso cuatro sesiones. En cada sesión se le insertan entre 1.000 y 1.500 cabellos. Las mujeres, por el contrario, lo que más demandan son el agrandamiento de los pechos (en muy pocas ocasiones para disminuirlos), las lipoesculturas para eliminar la grasa sobrante dando forma a la parte del cuerpo donde se actúa, estiramientos de cara y lifting faciales, así como los párpados, relleno de labios y eliminación de celulitis. Una operación para aumentar el volumen de los pechos puede costar entre los 3.000 y 4.000 euros, dependiendo de la intervención que sea necesario realizar, según apuntó la doctora Artigues que también subrayó que los pacientes de cirugía buscan ante todo profesionalidad y seriedad.