El PSOE reclama la dimisión del presidente del Consejo del Vino

En opinión de Giménez, la carta -de la que facilitó copias- demuestra claramente dos cosas. Por un lado revela que el proyecto para construir una nueva sede de los vinos en Cacabelos «sigue en el aire», tal y como denunciaron a finales del año pasado. Y por otro muestra las claras vinculaciones de Laredo con el PP al dirigirla exclusivamente a los alcaldes de esta formación. Algo que extraña al PSOE, si lo que se buscan son apoyos para evitar contratiempos en el proyecto de la nueva sede. La escueta misiva, convocando una reunión para mañana lunes, dice exactamente lo siguiente: «Al objeto de sostener una reunión informativa, la presidencia del Consejo Regulador y los vocales le convocan para el próximo lunes a una reunión a la que están convocados todos los alcaldes de los municipios inscritos en la Denominación Bierzo y que a su vez pertenecen al Partido Popular. Nuestra intención es hacerles partícipes de los cambios que pretende introducir la Consejería de Agricultura en el proyecto de sede del Consejo Regulador, los cuales consideramos inoportunos en las fechas que nos encontramos y que pueden tener una repercusión negativa sobre el trabajo y esfuerzo que han realizado ustedes en sus municipios». En opinión de Giménez, hechos como este, además de desprestigiar el nombre de la institución, ponen de manifiesto que «la presidencia del Consejo Regulador huele a podrido» porque es una entidad pública, no una opción política, que se debe únicamente a los intereses de los bodegueros del Bierzo y que nunca debe utilizarse en beneficio de unas siglas. Además, los «cambios inoportunos» a los que alude Laredo, demuestran que no es firme el proyecto para construir la nueva sede en Cacabelos. Giménez entiende que el presidente del Consejo debe explicar si la Junta piensa trasladar la sede a otro municipio -en su momento se habló de Villafranca o Ponferrada- o si el proyecto va a sufrir algún tipo de recorte.