La compañía afirma que la previsión de bajas hasta el 2005 se ciñe a la edad actual de la plantilla
La incertidumbre en el sector impide a Uminsa aventurar recolocaciones
Fuentes de la mayor empresa carbonera privada del país, Uminsa, quitaron ayer hierro al impacto que sobre el empleo pueda tener la previsión de b
Las principales explotaciones de Uminsa se encuentran en la zona de Fabero-Sil y en el Bierzo Alto
En medios de Unión Minera del Norte (Uminsa) ha caído mal el modo en el que se ha filtrado el contenido de un acta en el que aparecen las previsiones de baja por edad hasta el 2005, y que equivalen a una tercera parte de la actual plantilla. La empresa considera precipitado evaluar el impacto social de esta previsión de bajas. Pero tampoco se halla en disposición de anticipar cuál podría ser la relación de recolocaciones en los próximos años. Básicamente por «las incertidumbres» que atenazan al sector. Empezando por el hecho de que este año aún no se hayan recibido las ayudas al funcionamiento, y siguiendo por las dudas acerca de las reservas de mineral que fijará el nuevo reglamento. Si en el marco más optimista se cumplieran las perspectivas de seguir extrayendo más de dos millones de toneladas de carbón térmico, la sociedad del grupo Alonso no alberga dudas de que sería necesario incorporar operarios para mantener tal nivel. Ajuste en Virgilio Riesco Uminsa, por otro lado, fue acusada ayer de provocar filtraciones de agua en los yacimientos de Virgilio Riesco en Torre tras el abandono de la explotación de Camponanes. El sindicato CC.OO. anunció que este problema originará una regulación de plantilla que afectará también a los mineros de Carbones El Túnel. Comisiones criticó a la Junta por permitir el citado abandono de labores, que ya ha generado una avalancha.