El Gobierno cesa a García Ancos como fiscal jefe de Castilla y León por su trato a Nevenka
El Gobierno ha decretado el cese de José Luis García Ancos como fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, seis meses después de que el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, solicitara la remoción.
García Ancos fue expedientado por afirmar que la edil de Ponferrada Nevenka Fernández, víctima de acoso sexual por parte del alcalde, no era como «una empleada del Hipercor, a la que se le toca el culo y tiene que aguantar para llevar el pan a sus hijos». García Ancos ha continuado ejerciendo desde el 16 de octubre, fecha en que el Consejo Fiscal propuso al Gobierno su cese, hasta ahora, como fiscal jefe en Castilla y León. El pasado 28 de marzo, a propuesta del titular de Justicia, José María Michavila, el Consejo de Ministros, dispuso por fin su cese, que ayer fue publicado por el BOE. El expediente disciplinario abierto a García Ancos por su duro interrogatorio a Nevenka Fernández fue archivado, pero el Consejo Fiscal consideró oportuno proponer su cese al estimar que no reunía las condiciones para continuar en el puesto de fiscal jefe. García Ancos anunció hace meses que, cuando su cese fuese efectivo, optaría a una plaza de fiscal en el Tribunal Supremo. José Luis García Ancos ha permanecido 22 años como fiscal jefe de Castilla y León, pero su larga trayectoria se truncó por el polémico interrogatorio al que sometió a Nevenka Fernández, pese a tratarse de la víctima de un acoso sexual por parte del ex alcalde de Ponferrada. Álvarez fue condenado a pagar una multa de 6.480 euros y a indemnizar a la concejal con 12.000 euros y tiene recurrida la condena ante el Supremo.