Las líneas de autobuses urbanos de Ponferrada aumentarán un 30%

En el solar situado en la confluencia de la avenida de Compostilla con la calle La Baña se quiere ubicar, según desveló ayer el alcalde, Carlos López Riesco, una especie de terminal -una zona de intercambio de autobuses- para eliminar esta actividad de la calle Gómez Núñez, donde ahora se realiza en condiciones poco adecuadas. El proyecto municipal incluye la puesta en marcha de muchas más líneas atendidas por autobuses ecológicos con combustibles renovables y con mejores sistemas para facilitar la accesibilidad de los discapacitados. Todo el sistema estará informatizado y controlado por GPS, de tal manera que en las marquesinas de las paradas se instalarán unas pantallas que, en tiempo real, informen del tiempo que resta para que llegue el autobús a esa parada. También detallarán el aforo de los autobuses para determinar si es necesario reforzar esa línea con otros vehículos. Además se incrementarán las frecuencias -menos de quince minutos- de los autobuses de los barrios con el centro de la ciudad y con el Hospital del Bierzo. El alcalde eludió cifrar el coste de la remodelación. Tan sólo indicó que no es excesivo y dijo que este proyecto se incluirá en su programa electoral. «El servicio de autobuses urbanos de Ponferrada funciona, pero es mejorable y los vamos a hacer», subrayó el regidor.