Los participantes recorrieron 20 kilómetros por el arcén de la N-VI entre Ponferrada y Bembibre
Cien obreros del metal caminan a León exigiendo un convenio digno
La marcha pretende presionar a la patronal para desbolquear la negociación
La lluvia intermitente y no el sol se convirtió ayer en el mayor obstáculo que se encontró en la carretera el centenar de trabajadores del metal que iniciaron la anunciada marcha entre Ponferrada y León para reivindicar un convenio digno. Calzados con zapatillas y mochilas al hombro, los participantes en la primera etapa de la caminata tardaron en torno a cuatro horas en recorrer a pie los 20 kilómetros que separan el centro de la capital berciana del polideportivo de Bembbire, donde se disponían a pasar la noche en sacos de dormir para madrugar hoy y afrontar la subida al puerto de Manzanal. «No nos hemos parado a mirarnos los pies», decía ayer a las puertas de Bembibre el responsable de la sección comarcal del metal de CC.OO., Manuel García. Un vehículo de apoyo de la Cruz Roja y otros de los sindicatos UGT y CC.OO. respaldaron a los caminantes durante la primera jornada, que discurrió por las calles del centro de Ponferrada y por el arcén de la N-VI hasta llegar a Bembibre. «La gente ya se va quedando por el camino, porque algunos ya son mayores. Pero están con mucho valor y dispuestos a luchar por el convenio», decía por su parte, todavía saliendo de Ponferrada, el ugetista Miguel García. La marcha pretende presionar a la patronal para desbloquear la negociación del convenio para el sector, en punto muerto. La intención de los convocantes es recorrer hoy los 40 kilómetros que separan Bembibre de Astorga, dormir el jueves en Villadangos y llegar el viernes, cuarto día de huelga convocado esta semana, a León para participar en la manifestación prevista para el mediodía. Los caminantes no tienen intención de interrumpir el tráfico durante la marcha.