El presidente del Consejo acusa al PP de tomarse a broma su financiación

El presidente del Consejo Comarcal del Bierzo, Ricardo González Saavedra, lamentó ayer que el delegado de la Junta de Castilla y León, Eduardo Fernández, se haya tomado a broma las propuestas para lograr una financiación estable de la institución. A juicio de Saavedra, cuando Fernández tilda de «iluminaciones» las vías sugeridas por su equipo para reforzar las cuentas del Consejo no hace más que buscar la «parodia» fácil. El presidente de la entidad subrayó que la posibilidad de disfrutar de una cuota del impuesto de transacciones patrimoniales es sólo un ejemplo, «una referencia», y no significa que el Consejo pretenda convertirse en recaudador. «Hablamos de algunas referencias. Pero podrían ser otras. Lo que queremos es abrir un debate sobre la financiación del Consejo Comarcal», señaló. Saavedra manifestó que si el PP realmente quiere que el Consejo disponga de autonomía y de competencias -como el PSOE-, entonces es el momento de abrir la negociación más allá del convenio marco firmado por su antecesor, Jesús Esteban Rodríguez, con la Junta de Castilla y León. Saavedra, con la vista puesta en la reunión que mantendrá el próximo día 14 o 15 de este mes con el consejero de Presidencia, Alfonso Fernández Mañueco, ya anticipó que el citado convenio resulta insuficientes desde el punto de vista de la financiación. Doce años, y en pañales Aunque también matizó que es posible que si se desarrolla el acuerdo marco se encuentre alguna fórmula mejor, el presidente comarcal explicó que a su juicio el convenio «constriñe la capacidad del Consejo proque sus sistemas de financiación tienen carácter cuatrienal, y por lo tanto condicionan la continuidad de los proyectos». «La Junta puede hacer bromas con todo esto, pero no debe», insistió en referencia a los últimas declaraciones de Eduardo Fernández. «Queremos los mismos derechos que cualquier ayuntamiento o diputación», abundó. Saavedra fue incluso más allá en último término y apuntó la posibilidad de que se estudie ya la modificación de la Ley de Comarca para evitar que al Consejo le sigan tratando como un bebé. «Tenemos ya muchos años, doce, para seguir con pañales. Nuestra edad mental, en términos psicológicos, no se corresponde con la cronológica».