Los representantes de IU solicitan de nuevo al párroco que traslade la lápida de la guerra al camposanto

La agrupación local de IU de Fabero quiere mostrar todo su respeto hacia las familias de las personas cuyos nombres figuran en la placa de la iglesia del pueblo. Sin embargo muestran su convencimiento en que el sitio adecuado para recordar a los difuntos es el cementerio. IU cree que el párroco Máximo Álvarez está legitimando la dictadura con la reposición de la placa. «Es conveniente para la convivencia democrática que se mantenga el espíritu de concordia y reconciliación que presidió la constitución y que facilitó la transición pacífica de la dictadura a la democracia», manifiestan. Por ello, reivindican la desaparición de toda España de aquellas inscripciones, conmemoraciones, monumentos o calles dedicadas a exaltar el genocidio franquista o a denigrar el recuerdo de las víctimas. Por otro lado, explican que coinciden con Máximo Álvarez en la condena de la quema de las iglesias durante la contienda. Sin embargo, creen que en aquella época los sacerdotes fueron actores activos en la denuncia y asesinato de republicanos. «Seguimos pensando lo mismo y le invitamos a la reflexión y al análisis, y que valore los sentimientos de todos y no sólo los de una parte», dicen.