La estación del ferrocarril de Toral de los Vados ha desaparecido y se ha convertido en un apeadero

La estación del ferrocarril de Toral de los Vados -la más importante entre el Barco de Valdeorras y Ponferrada- se ha ido desmoronando paulatinamente hasta convertirse en la actualidad en un «miserable apeadero» que carece incluso de electricidad. Esta situación se ve reflejada en que los diez o doce focos junto al letrero que señalaba el nombre de Toral de los Vados, están apagados. Al mismo tiempo las personas que viajan por la noche tienen que valerse de un mechero para salvar las dificultades que supone acceder al segundo andén. No obstante, el declive de la estación comenzó hace unos diez años aproximadamente cuando se produjo una importante reducción en este servicio dejando tan sólo dos trenes locales y suprimiendo la línea férrea de Villafranca. Posteriormente, cerraron el despacho de billetes y, últimamente se cerró la estación cuyo personal fue a parar a la factoría de Cementos Cosmos. Todos estos factores han desembocado en que la prestigiosa estación haya quedado reducida a un simple apeadero. Antaño el entronque ferroviario con Villafranca del Bierzo le proporcionaba un buen contingente de viajeros y mercancías. Todos los trenes tenían aquí parada y en Toral residía el numeroso personal del servicio de circulación, incluidas las brigadas de conservación viaria y ahora la estación «ha muerto». En esta ocasión se puede decir que la Renfe cumplió al pie de la letra aquello de «apaga y vamonos».