Guías de vinos
Durante el mes de diciembre salen al mercado numerosas guías de vino de gran utilidad para el aficionado y para el profesional de este mundo, son de carácter anual y recogen información sobre vinos y bodegas. La mecánica de funcionamiento es aparentemente muy sencilla: seis meses antes de su publicación los responsables piden muestras a cada bodega para que sean catadas por un panel de catadores formado por profesionales del sector, entre ellos se encuentran periodistas especializados, sumilleres y enólogos, los vinos son catados con su etiqueta oculta para asegurar la imparcialidad del resultado. Algunas son determinantes en un mercado tan competitivo como el del vino no tanto para las bodegas ya consagradas como para las que están empezando. Normalmente aparecen con una introducción en la que se ofrecen indicaciones de mecánica de cata, cómo servir y consumir el vino y sugerencias de acompañamientos entre vinos y platos. La más conocida y determinante, una de las más antiguas es la afamada Guía Peñín de los Vinos de España, en ella aparecen 2.400 vinos reseñados, el criterio de elección es sólo la calidad. Están catados la mayoría de los vinos españoles que son conocidos. Cada año lo tienen más difícil para seleccionar entre las bodegas, las nuevas tendencias influyen bastante, tal y como parece se valora más lo desconocido y las zonas emergentes, como ha ocurrido con nuestra denominación, debido también a la demanda el público. Veinte vinos son elegidos entre los mejores con puntuaciones, aunque no siempre están al alcance de todos por sus precios y se plantea la pregunta ¿existe una relación del precio con la calidad de ese vino elegido entre los mejores?, ¿el vino para ser «bueno» tiene que ser caro?, en Estados Unidos los consumidores, caprichosos de por sí, están cansados de pagar grandes sumas por vinos que quizá no valgan tanto y no son más que fruto de campañas de marketing que inflan los precios y los convierten en objetos de deseo para fanáticos e iluminados. También podemos encontrarnos sorpresas en este tipo de anuarios o guías, con productos cuya puntuación es muy buena el precio está pensado para tristes mortales, la Guía de los 365 Vinos al Año, que elige los once magníficos en relación a su criterio de calidad, esta guía nos sugiere un vino para cada día del año y presenta de una manera muy intuitiva la ficha de cata con una breve explicación de la bodega, la denominación en la que está situada.