El aprovechamiento inmobiliario, eje de la ampliación de los servicios

El alcalde de Ponferrada, Carlos López Riesco, no fue muy preciso al respecto. Pero sí bastante claro al confirmar, en esencia, que la ampliación de servicios al poblado de Compostilla y la mejora de infraestructuras no saldrán del bolsillo del resto de los contribuyentes ponferradinos. «Las inversiones no podían salir directamente del Ayuntamiento», comentó Riesco para recordar a continuación que éstas se tendrán que costear con el aprovechamiento de las parcelas de uso residencial que ya están calificadas y con las que en el futuro se definan como de rentabilidad inmobiliaria. Entre los 600.000 metros del patrimonio de la eléctrica que pasan al Ayuntamiento existen 310.000 metros cuadrados de tierras sin uso definido, «que se estienden fundamentalmente al norte del poblado en dirección al embalse de Bárcena». «Más adelante», significó el alcalde, «definiremos como queda esos terrenos. Pero es una gestión muy ventajosa, porque entre la montaña de carbón y este convenio, Ponferrada consigue una gran bolsa de suelo». Riesco también confirmó que Endesa se garantiza en el convenio que sus empleados, que ya han adquirido buena parte de las 140 viviendas que eran propiedad de la eléctrica, tampoco tendrán que prescidir de los derechos de gratuidad en los servicios que tenían adquiridos. Por ello, el alcalde insistió en que la única fórmula posible de autofinanciar la municipalización del poblado es a costa de vender suelo.