Denuncian la tala de abedules robles y acebos en Porcarizas

Abedules, robles y acebos están siendo talados de forma indiscriminada en el bosque de Porcarizas (Villafranca), uno de los últimos refugios del urogallo en la zona de los Ancares. La asociación para la protección de los árboles A Morteira señaló a la propia Junta de Castilla y León como responsable de la tala y aseguró en una nota que ya han desaparecido «cientos» de árboles de las tres especies autóctonas -los acebos gozan de protección especial. «Con fondos europeos destinados a la mejora del medio natural se está estropeando uno de los mejores ecosistemas de los Ancares». A Morteira considera «pésimamente realizados por empresas subcontratadas» los trabajos de selvicultura en la zona y lamenta el «escaso control de la administración que tendría que supervisar estas labores». El colectivo se pregunta cómo la administración puede permitir «la entresaca y poda de acebos centenarios, especie altamente protegida, como si se tratara de una plantación de pinos». La asociación insiste en los bosques de Porcarizas «no son cultivos para el aprovechamiento maderero, sino que son espacios únicos en los que apenas se debe intervenir» y que constituyen «el hábitat natural de numerosas especies (lobo, oso, urogallo, corzo o ciervo) altamente sensibles a cualquier alteración del medio». A Morterira también denuncia «la proliferación indiscriminada de pistas forestales que últimamente están invadiendo hasta los espacios más vírgenes» y lamenta que «los mayores impactos medioambientales en estas zonas protegidas los esté provocando la Consejería de Medio Ambiente». La asociación pide a las administraciones que defiendan los bosques bercianos «auténticos y frágiles monumentos naturales y maravillosos espacios de vida, últimos reductos de los bosques que algún día cubrieron los montes del Bierzo».