El Aguzo
HACE unos días nuestro paisano Álvarez de Paz, Pepe para amigos y conocidos, hablaba en su columna del colectivo cultural La Iguiada, que puso en marcha la revista El Aguzo . Me alegra que Pepe haya escrito de este asunto porque conviene sacar a la luz aquello que no suele figurar en portadas de periódicos, ni siquiera en las noticias diarias, aquello que suele pasar desapercibido, aunque sea de interés. ¿Quién marca lo que es interesante o lo que no vale ni para un cacho calzapete ? ¿Quién decide lo que nos conviene? No sé la repercusión que habrá tenido el primer número de El Aguzo , pues ha sido una pequeña edición y sólo se ha repartido, me parece, entre oriundos de Noceda, aunque haya llegado algún que otro ejemplar a diferentes lugares, incluso haya atravesado las fronteras del país. Convendría, sin embargo, que esta revista fuera conocida más allá del ámbito nocedense . Esperamos que, al menos, tenga continuidad y sea conocida en todo el Bierzo. Comienza a perfilarse lo que será el segundo número, cuya tirada estará lista quizá para el mes de agosto, pues es este un mes movidito y festivo en Noceda del Bierzo. Es cuando los foráneos -antes se decía forasteros, quizá por influencia del cine del Oeste- arriban a Noceda en busca de jolgorio y buenas viandas. Antaño se celebraba la llamada fiesta del forastero. Ahora le dicen la fiesta del turista. Es evidente que también nosotros nos hemos vuelto más finolis, lo cual debe obedecer a la globalización en la que vivimos. Es agosto un mes en el que el personal anda de feria en feria, de barrio en barrio -no olvidemos que cada barrio tiene su fiesta- y de pedanía en pedanía moviendo el cuerpo y levantado el jarro. Los rapaces y las guajinas, ávidos de farra, se pasan el mes en un danza que te friego. Como es agosto tiempo de fandango, que reúne en torno a su fuego sagrado a los nocedenses que en el mundo hay, se aprovecha el tirón de la revista para que la gente, además de sestear y farandulear, lea algo que le pueda resultar de interés, pues esta revista no tiene otra intención que recuperar la historia de Noceda, nuestras raíces, sin enfangarse en las nebulosas embrolladas de la política. La palabra aguzo, según el diccionario berciano de Noceda, también podría utilizarse como sinónimo de flaco. Ahora me entero de que en su día el ayuntamiento de Igüeña registró el nombre aguzo para una publicación similar.