Riesco y Rodríguez pactan un nuevo talante en la relación entre PP y PSOE

La entrevista mantenida ayer entre el alcalde de Ponferrada, Carlos López Riesco, y el portavoz del PSOE, Roberto Rodríguez, promete convertirse en «un punto y aparte», según enfatizó éste último, en las asperas relaciones que los populares habían mantenido con la líder socialista, Charo Velasco, y viceversa. La entrevista entre Rodríguez, a quien acompañaba la concejala Olga Cañadas, y López Riesco, secundado por Juan Elicio Fierro y Manuel Rodríguez, marca un hito en los últimos años en el diálogo entre los grupos mayoritarios en el Ayuntamiento de Ponferrada. Unos y otros no sólo convinieron en dar un giro de ciento ochenta grados en el talante que ha presidido todas las confrontaciones en la Corporación local, sino que la reunión también ha de servir para «normalizar» la actividad político-administrativa. El portavoz socialista, Roberto Rodríguez, indicó que al margen de la «cordialidad» que presidió la entrevista, ésta significa la vuelta a la convocatoria de sesiones ordinarias prácticamente cada semana de final de mes. Y luego también, acentuar la periodicidad de algunas comisiones de áreas en las que la oposición echa de menos su convocatoria. Incluso, según resaltó Rodríguez, el alcalde ha acptado que la junta de protavoces vuelva a «servir de punto de encuentro entre gobierno y oposición». La única propuesta socialista que los populares no han encajado es la de volver a contratar un auxiliar para el grupo socialista. Pero en sintonía con la promesa de un cambio de talante, el propio Roberto Rodríguez aceptó el argumento de las dificultades presupuestarias que esgrimió el alcalde. «Entendemos que si existe ese probema no se contrate», admitió. Para los populares, la contrapartida que los socialistas ofrecen de algún modo al hilo del restablecimiento del entente mínimo en el juego político en el Ayuntamiento, es la erradicación de los discursos que han sido frecuentes durante la etapa de liderato de Charo Velasco, en los que se han «sembrado sospechas», en muchos casos de índole muy personal, sobre la gestión de los miembros del equipo de gobierno. «Estamos satisfechos por el resultado de la reunión, porque esto puede contribuir a la mejora de la imagen de los políticos. Lo único que les hemos pedido es lealtad. Que las intervenciones no den pie a que se siembre inquietudes y se trasladen sospechas entre los ciudadanos, que son siempre muy desagradables», significó el portavoz del PP, Manuel Rodríguez, tras la entrevista. Aunque Rodríguez, como ya había adelantado el nuevo responsable del grupo socialista, también ratificó que esa lealtad no significa renunciar a la controversia y a la defensa de dos programas que ofrecen enfoques divergentes en muchos asuntos. «Que haya una relación fluida es lógico en una institución. Pero eso no significa que no vayamos a exponer nuestras opiniones encontradas con el equipo de gobierno», resaltó el número uno del PSOE. «Que haya una relación fluida no significa que no vayamos a expresar opiniones encontradas» ROBERTO RODRÍGUEZ Portavoz del PSOE en Ponferrada