La suelta del agua, broche de las fiestas

La tradicional suelta del agua, que pone el broche de oro a las fiestas de Molina congregó, un año más, a cientos de jóvenes que, después de realizar la tradicional ronda de bodegas, comenzaron el nuevo día lanzándose calderos de agua. Las calles del pueblo se convirtieron en el escenario de esta tradicional guerra de agua que se prolongó hasta la salida del sol. Después, el ayuntamiento invitó a un chocolate con churros para calentar los cuerpos, empapados por las frias aguas del Meruelo. | dl