Ahorrar en gasolina, misión imposible

Intentar ahorrar unos centimillos a la hora de llenar el depósito del coche resulta casi imposible en las estaciones de servicio que salpican las carreteras bercianas. Los altos precios que los combustibles están adquiriendo hacen cada vez más complicado encontrar algo de competencia entre las diferentes compañías, para beneficio del consumidor. Así se desprende de un estudio comparativo de los precios realizado por este periódico en once estaciones de servicio, situadas en Ponferrada y en otros pueblos de alrededor. De las que se encuentran en Ponferrada y en los barrios de Fuentesnuevas, La Martina y Columbrianos, se observa que lo máximo que pueden ahorrar los conductores es un céntimo de euro por litro, si repostan diésel. Éste es el combustible más barato, a un precio de 0.78 céntimos por litro, a excepción de en un par de éstas gasolineras, dónde su precio asciende a los 0.79 céntimos. Esta mínima diferencia también se cumple en el caso de la gasolina Super 97. Su precio en la mayoría de las estaciones es de 0.97 céntimos, a excepción de la gasolinera Valcarce (Vega de Valcarce) en la que cuesta 0.98 céntimos y en AGGIP -en la Gran Manzana de Ponferrada- cuyo precio roza el euro; 0.99 céntimos. Sólo saliendo de Ponferrada se puede economizar un poco. Hasta dos céntimos si nuestro coche es diésel y nos acercamos a Bembibre, donde este combustible está a 0.76 céntimos. En el caso de la gasolinera de Fabero, pertenenciente al grupo Repsol YPF ocurre lo mismo, allí se rebaja un céntimo el precio de la sin plomo 95 y 98 y del gasóleo, con respecto a los precios de Ponferrada. Referencias foráneas Dentro de la provincia de León, los surtidores más baratos se pueden encontrar en el hipermercado de Leclerc en San Andrés del Rabanedo, donde la gasolina 95 está a 0,86 céntimos y el gasóleo a 0,72. Algo más lejos, en el contexto de la comunidad castellanoleonesa, en la localidad de Cisneros, en la provincia de Palencia opera una estación con un precio de 0,84 euros para la 95 y de 0,67 para el gasóleo -una de las más baratas de España-, según los últimos datos del Ministerio de Economía de esta misma semana. Lo más preocupante es que todo apunta a que los precios seguirán aumentando. Desde la última subida, que se produjo a principios de agosto, mes por excelencia de vacaciones, las tres prinicipales petroleras españolas incrementaron el precio de sus carburantes en 6 céntimos las gasolinas y en 1.2 céntimos el gasóleo. Algo que habrán notado los bolsillos de los conductores al llenar sus depósitos. Mala pinta En lo que va de año el precio de los carburantes ha ascendido un siete por ciento de media y para lo que resta, las estaciones de servicio auguran un crecicmiento similar. Según el portavoz de la confederación Española de Estaciones de Servicio (C.E.E.S), Casto Bravo, a partir del próximo mes de septiembre se empezarán a ver los efectos de los nuevos máximos. El precio de la gasolina Super podría sobrepasar el euro por litro, en octubre, y la Sin Plomo rondará los 0.97 céntimos de euro. El consuelo español El carburante que pese a que también aumenta de precio sigue siendo más barato, es el gasóleo, cuyo litro costará previsiblemente 0.83 céntimos, cuando nos acerquemos al próximo mes de octubre. Si todo sigue así los combustibles acumularán durante el presente año una subida del 20%, en España. El crecimiento anual será más de seis veces el IPC, situándose en el 3,2%. Puede servir de consuelo el hecho de que de los países de la Unión Europea España es, después de Grecia, el país que dispone del precio más bajo en gasolina sin plomo. La media europea sitúa a este tipo de combustible en un precio de 1.14 euros por litro. Si hiciérmos un ranking de los tres países con los precios más altos, el primer puesto correspondería a Holanda, 1.26 euros, después iría el Reino Unido, 1.22 euros y por último Alemania, dónde el precio de la sin plomo es de 1.15, un céntimo por encima de la media europea. Así pues, por caro que a los consuumidores nos perzca, nos tendremos que convencer de que la media de 0.89 céntimos que pagamos por litro de sin plomo es un precio de lo más apañado.