Pirotecnia del Bierzo, como el famoso eslogan, donde va triunfa

No hay fiesta que se precie que no cuente con sus fuegos artificiales, es más, sin cohetes no parece que haya ni fiesta. Al menos eso es lo que todo el mundo piensa cuando se trata de pensar en una programación de celebraciones. Conocedores de ello, el Ayuntamiento de Camponaraya, uno de los más imaginativos y dinámicos de la provincia de León, pensó rápidamente en la empresa «Pibierzo» como la sociedad encargada de realizar los fuegos artificiales de las fiestas en honor a la Virgen de La Soledad que se celebran este fin de semana. Puestos al habla con Federico Fernández, de la Dirección de esta firma, nos narra anécdotas acumuladas en años de duro trabajo. «Como en Santa Bárbara en el cuartel de Astorga, donde de las carcasas salían banderas de España en tela. O en las muchas bodas para las que trabajamos. Para eso tenemos letreros luminosos con los nombres de los novios y un corazón». Enfrascados en la conversación hablamos de su último premio, el de La Encina. «Satisfación, gusto, alegría... Sentirse reconocido en la zona de donde eres y trabajas», explica Fernández. Los únicos pirotécnicos de la comarca cuentan con una máquina de disparo por control remoto. Esperan en Camponaraya dar todo su esmero y cariño a la población, la cual «le gusta siempre el buqué final de ruido y color. Carcasas grandes, los sauces y la traca final», dice Federico Fernández quien añade que «en Camponaraya el campo es grande y de buena visibilidad». Además del premio de Ponferrada, «Pibierzo» ha cosechado premios en Arévalo, Valladolid y dejado buen recuerdo en León capital. Así pues, los pueblos del Bierzo, por ajustados de presupuesto que se encuentren, suelen recurrir a esta empresa por los ahorros de transporte con otras foráneas.