La asociación eligió a Emiliano Ruberte nuevo presidente, y a Julia Martín como vicepresidenta
Los vecinos del casco viejo esperan un gran aparcamiento sobre el actual canal
Los residentes piden más control sobre los pubs y negocios hosteleros, y más actividad policial
El soterramiento del canal sería una buena solución para mejorar el aparcamiento en el casco antiguo
La Asociación de Vecinos del Casco Antigo de Ponferrada despidió el jueves a Adelino Pérez como presidente y abrió una nueva tapa de gestión para la dirección de Emiliano Ruberte. Aunque Pérez, en su adiós al cargo, realizó un importante anuncio para la zona histórica de la ciudad. Según el hasta ahora responsable de este colectivo comunitario, el Ayuntamiento de Ponferrada lleva muy adelantado el proyecto para el soterramiento del canal de Endesa. Y según explicó, el propósito es que en la superficie se habilite un importante franja central dedicada al aparcamiento de vehículos. Aunque también advirtió que la financiación de la obra dependerá en buena medida de la contribución que pueda realizar la compañía eléctrica. Además, en el curso de la asamblea, los más de sesenta asistentes a la misma, volvieron a poner el acento en una cuestión que ya se expuso como preocupante a lo largo del pasado verano. Los vecinos quieren que el Ayuntamiento sea mucho más estricto en el control de las actividades de los pubs y bares que en los últimos tiempos han proliferado en el área histórica de la capital berciana. Ruidos y cierres En un plano mucho más concreto, se reclamó públicamente más presencia de la Policía Municipal para velar por el cumplimiento de la normativa en materia de ruidos, y también del Cuerpo Nacional de Policía para exigir la aplicación de los horarios de cierre. De estos temas tendrán que hacerse cargo, no obstante, los nuevos cargos de la directiva. Emiliano Ruberte fue designado presidente, Jualia Martín Mateos, vicepresidenta, y Manuel Cuadrado y Juan Antonio González, que desempeñarán los puesto de secretario y tesorero, respectivamente. Acerca de la reciente liberación de los 9,6 millones de euros aprobados por el Espacio Económico Europeo para el casco y también para el castillo, Ruberte se mostró escéptico hasta no constatar el inicio de las obras. Su precedesor, en cambio, expresó su esperanza de que las mejoras arranquen a primeros de año.