No se dijo del Congreso del PP...
LA VORÁGINE diaria nos hace parecer que el Congreso Nacional del PP quedó atrás, muy atrás, en lo lejano. Pero no, sus ecos, su verdadera esencia, con el paso de las semanas va separando el grano de la paja, apagando el naranja fosforito inventado por sus creativos propagandísticos para volver al azul más marino y oscuro que nos devuelve a épocas superadas. Aquella derecha de traje azul heredado de tiempos pasados, gomina resistente a los vientos de cambio y manual de ideología o comportamiento establecido previamente parecen haber vuelto a renacer. ¿Dónde quedó la centroderecha? Tan sólo uno, Gallardón, pareció estar a la altura de los tiempos: «algo habremos hecho mal», dijo, y cayeron todos los maleficios posibles sobre él. El berciano Manolo Cobo de escudero gallardoniano aguantando mecha. La delegación regional con Herrera a la cabeza ofreciendo la región como el eterno granero electoral. Excesiva confianza. Alfredo Prada saludando a diestro y siniestro con su cohorte de leoneses que trabajan con él en la Vicepresidencia de la Comunidad de Madrid. Los altos cargos orgánicos leoneses y bercianos dando sensación de unidad con deseos de olvidar que buena parte de los pelos se han quedado en la gatera del Bierzo. El exalto cargo juntero y exdirectivo del otro periódico leonés, Cabañeros, «Caba» para los amigos, mandando hacer fotos a diestro y siniestro sin saber que, mientras, su empresario jefe firmaba su cese. El ganador de las elecciones al Ayuntamiento de León guardando las formas sin confirmar o desmentir su posicionamiento con los díscolos bercianos. El presidente de la Diputación, García Prieto, amigo personal de «Juanvi», ejerciendo de tercera vía en un conflicto interno enquistado. Otros presidentes, el provincial y el comarcal provisional, abiertos de par en par a oir y ser oidos por compañeros compromisarios que pululaban por allí o que conformaban el grupo oficial de la excursión a Madrid, entre éstos, Eduardo Fernández levantando cada vez más la cabeza. El resultado, repito, un giro a la derecha a nivel nacional tanto en nombres como en actitudes. A nivel provincial y comarcal, una lección para que los representantes en el congreso regional del 20N en Salamanca se elijan de forma discreta y sin más luces y taquígrafos que sus representantes internos. Pero la verdadera batalla se librará más tarde, en el provincial y en el berciano. Mientras, atentos a los nombramientos.