El PSOE rechaza que el centro cívico de Dehesas se llame Ismael Álvarez

La comisión de Cultura del Ayuntamiento de Ponferrada acordó ayer poner el nombre del ex alcalde, el popular Ismael Álvarez, al recién inaugurado centro cívico de Dehesas, su localidad natal. Esta decisión del equipo de gobierno del PP, que se elevará a la aprobación plenaria del próximo viernes, despertó el enfado y la oposición frontal del grupo de concejales del PSOE. La portavoz socialista en la comisión de Cultura, Ángela Marqués, dijo que promover este tipo de homenajes puede ser entendido por un sector de la sociedad como «apología del acoso sexual», después de que Ismael Álvarez fuera condenado por ese delito en la persona de la ex concejala de Hacienda, Nevenka Fernández. El PSOE ha pedido al grupo del alcalde Carlos López Riesco que reflexione y se plantee «si realmente la figura de una persona condenada encarna los valores y principios que desde el Ayuntamiento se quiere promover, fundamentalmente entre los más jóvenes». Entienden los socialistas que hay otras personas que pueden servir de mejor ejemplo. «Más allá de las servidumbres que el grupo del PP tenga que pagar a esta persona, es un error continuar con esta iniciativa», inciden. La oposición espera que el alcalde recapacite, puesto que de persistir en lo que ven como un error, «puede llegar a considerarse como una provocación a una sociedad sensibilizada por los delitos que se comenten contra las mujeres». Desde el PP, el pedáneo de Dehesas y concejal de Ponferrada, Julio Potes, aseguró que el concejal del PSOE y vocal del mismo grupo en la Junta Vecinal, Pedro Prada, había acordado con él apoyar la concesión del nombre de Ismael Álvarez al centro cívico. Sin embargo, la concejala Olga Cañadas dijo que el viernes se verá que su concejal votará en pleno en contra de la propuesta. El pedáneo de Dehesas dijo que si a él, el partido le hace «una jugada» como la hecha por el PSOE a Pedro Prada, presentaría de inmediato la dimisión, porque se vería su manipulación.