El Ayuntamiento ha limitado la promoción de las ruinas mientras las pone en valor
La pretensión de atraer a cien mil visitantes anuales -las ruinas reciben ahora unos 60.000- «no es algo ilusorio» para el alcalde, que ayer insistió en destacar «la gran trascendencia histórica» que tendrá para Ponferrada la reconstrucción y puesta en uso de su castillo. «Ponferrada va a cambiar con este proyecto», sentenció Riesco antes de reconocer que el Ayuntamiento no ha promocionado especialmente la fortaleza porque todavía no es «un producto turístico de calidad». Y es que la idea del equipo de gobierno es poner al castillo «en primera línea de los activos y el patrimonio de la ciudad», dándole un contenido «social» al habilitar espacios para usos públicos. Riesco pretende que el monumento sea incluso «otro hito como Las Médulas» para el Bierzo, aun cuando el paraje arqueológico siempre se diferencia por su condición de Patrimonio de la Humanidad. El alcalde, que el pasado lunes agradeció expresamente el trabajo del arquitecto municipal Pablo Uriarte, y del jefe de la Oficina de Desarrollo, José Luis Ventoso, en el proyecto de restauración dirigido por Fernando Cobos, también quiso citar ayer el apoyo a la recuperación del monumento de la ex consejera de Economía de la Junta, Isabel Carrasco, a quién también respalda para dirigir al PP en León.