Penas deja entrever motivos económicos en la dimisión del cineasta como director honorífico
El rector defiende la Escuela de Cine ante la crítica académica de Suárez
La Universidad admite el cambio de orientación en el centro del Campus del Bierzo
El rector de la Universidad de Leon, Ángel Penas, explicó ayer que las relaciones entre la institución académica y Gonzalo Suárez «no han acabado mal». Penas, tras la dimisión del prestigioso cineasta como director honorífico de la Escuela de Cine de Ponferrada, defendió la marcha de este centro instalado en el campus berciano y apuntó a motivos extraacadémicos para justificar la salida de Suárez. «Hace más de un mes que recibí un escrito del señor Gonzalo Suárez en el que pone a disposición su cargo de director honorífico, honorífico entre comillas porque tenía remuneración, y por lo tanto no es ninguna sorpresa», comentó. Pero no fue mucho más allá en los motivos del abandono. «Quedan en la intimidad». Aunque a renglón seguido aclaró que no tienen nada que ver con el funcionamiento de la Escuela de Cine de la Universidad de León. «Son cuestiones de otra índole que no voy a expresar públicamente, pero que conozco y que en ningún caso se derivan de la relación entre la institución y el propio Gonzalo Suárez», aseveró. Respecto al sueldo que recibía Suárez por ser director honorífico, resaltó que «no salía caro». Aunque, como reveló ayer este periódico, el cineasta asturiano dejó muy claro que su discrepancia está relacionada básicamente con la gestión académica del actual director, Eduardo Keudell. «Este es un momento en el que la Escuela pasa a depender más directamente de lo que es la estructura docente de la Universidad», remachó el rector, «y a él no le parecía tan conveniente por lo que se abrieron expectativas diferentes, y caminos distintos». Penas descartó el nombramiento de un director honorífico, puesto que la Escuela de Cine, dependiente de la Facultad de Educación, tiene un decano y un vicedecano «que ejercen el papel de dirección académica de esta titulación propia de la ULE». Además, Ángel Penas insistió en que «Gonzalo Suárez representaba una dirección extra universitaria que nos ha permitido disfrutar de docentes extraordinarios, algo que permanecerá en la actualidad, independiente de que Suárez sea o no director honorífico».