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EL Ayuntamiento y las diversas asociaciones despidieron el Jacobeo con una peregrinación

El Año Santo trajo a más de 41.600 peregrinos hasta Ponferrada El alcalde de Vega dice que no hay cotillón por falta de dinero

El acto se cerró con una misa homenaje en la iglesia de Santiago Apóstol de Flores

Imagen de ayer tarde de la peregrinación a su paso por la calle del Reloj

Publicado por
Laura García - ponferrada ponferrada
Ponferrada

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El Ayuntamiento de Ponferrada en colaboración con la asociación de Amigos del Camino de Santiago, la asociación Amalio Fernández y la Cofradía Santiago Apóstol, quiso despedir como se merece el Jacobeo 2004 con una peregrinación simbólica que partió ayer, a las seis de la tarde, desde la plaza del Ayuntamiento hasta la iglesia de Santiago Apóstol de Flores del Sil. Al acto, que reunió a más de un centenar de personas, también acudió el alcalde de la ciudad, Carlos López Riesco, que quiso destacar la gestión realizada por la Asociación de Amigos del Camino de Santiago durante todo el Año Santo, «mostrando la mejor cara de Ponferrada a todos los peregrinos», añadió. En concreto, han sido más de 41.600 los peregrinos que han pasado durante este año por Ponferrada, ya sea comenzando aquí su andadura hacia Santiago o haciendo una parada para descansar y ver la ciudad. A este respecto el alcalde quiso hacer una valoración muy positiva de lo que representa esta tradición para la ciudad. «El Camino de Santiago está siendo para Ponferrada el mejor escaparate para ofrecer a los peregrinos todo lo que la ciudad tiene». Y como tal escaparate expresó la intención del gobierno municipal de trabajar más y mejor para que así siga siendo. El recorrido realizado por la comitiva transcurrió por las calles del casco antiguo, avenida del Castillo, barrio del Temple y llegando finalmente a su destino en Flores del Sil. Allí, en torno a las siete de la tarde, se celebró una misa en homenaje a los peregrinos fallecidos haciendo el Camino. Al término de la misa se sirvió a los asistentes un vaso de fervudo, mezcla de vino caliente, miel y azúcar, que seguramente les sirvió para entrar en calor. El alcalde de Vega de Espinareda, Mario Guerra, dijo ayer que la suspensión de la fiesta popular de fin de año está plenamente justificada por la falta de fondos de la Junta Vecinal. A este motivo se unen las quejas de los establecimientos hosteleros del municipio que consideran esta actividad un caso de competencia amparado desde las instituciones. Así lo explicó el alcalde, «los negocios pagan contribuciones y es lógico que el día de Fin de Año no le hagamos el Ayuntamiento y la Junta Vecinal la competencia».

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