CUATRO GATOS
Congosto destinará 600.000 euros para un polideportivo y una piscina Lo útil se llama artesanía
Los vecinos del municipio de Congosto disfrutarán a lo largo del presente 2005 de un Polideportivo Municipal y una piscina pública. En el primero de los casos la pretensión es iniciar las obras cuanto antes en la cabecera del municipio mientras que el caso de la piscina sólo faltan realizar obras menores para que a principios del verano esté plenamente operativa en las cercanías de San Miguel de las Dueñas. Junto a estos dos proyectos, el equipo de gobierno municipal presidido por José Antonio Velasco acometerá otra serie de actuaciones siendo la red de abastecimiento una de las destinatarias de la inversión. Precisamente la inversión realizada llegará a los 800.000 euros aportados no sólo por las arcas municipales sino por otras administraciones supramunicipales con el fin de solucionar cuanto antes las deficiencias que algunos de los pueblos del término municipal presentaban en materia de agua. La dotación de nuevas unidades escolares en Almázcara, un edificio de servicios múltiples cuyo coste será de 360.000 euros, una nueva depuradora en Congosto o la actuación en varias calles de Almázcara y San Miguel destinada a mejorar su pavimentación serán los ejes de intervención por parte del Ayuntamiento para el año 2005. Precisamente a lo largo de las próximas semanas estará lista la memoria del presupuesto con el que pretende trabajar el equipo de gobierno municipal y que para este ejercicio es de 720.000 euros. OSCAR Wilde, inglés pendenciero y tabernario, genial literato, homosexual escondido, dice en los prolegómenos de El Retrato de Dorian Grey que todo arte es inútil. Pero si es la más elevada forma de expresión humana, Pero si consigue arrancar emociones al corazón más desierto, ¿no es el arte germen, fruto y pilar de una evolución sorprendente?, ¿no cura al neurótico de sus demonios?, ¿no embellece lugares?, ¿no explica la complejidad de eso que ha dado en llamarse mapa emocional?, ¿es que no merece un respeto, una contemplación, una oportunidad, otro adjetivo?. Pónganse como se pongan un artista, un confiado, un teórico o un galerista, la afirmación no deja de ser tajante y cierta. Lo útil se llama artesanía. Campo en el que, por otro lado, se han realizado y se realizan auténticas obras de arte. Aunque con el tiempo y el devenir de los gustos a capricho de las corrientes, hemos llegado ya a ver la belleza del cacharro más rudimentario. Y con el tiempo y el devenir de las costumbres a capricho del progreso la profesión no se limita a pasar de padres a hijos, sino que se elige, se prefiere, se puede escoger como se escoge cualquier otro trabajo. Basta descubrirlo y ponerse manos a las obras. Es duro. Son kilómetros, ferias distantes, horas de trabajo que se clavan en las cervicales, días peores que no producen, montar y desmontar, colocar y descolocar, sacar y guardar, decir mil veces cuánto cuesta, enfrentarse a regateos miserables, sopesar la rentabilidad a la intemperie o, en el mejor de los casos, bajo techo y con estufa. Hace tres años, los artesanos habituales de las calles colindantes a la plaza de Lazúrtegui y la Avenida de España, probablemente se hubieran reído escépticos ante posibilidad tan ideal. Sin hablar de la Feria Internacional de Artesanía que, bajo toldo y en la calle Pérez Colino les hizo competencia desigual, y en la que yo trabajé como dependienta vendiendo lo que, para ser exactos, da en llamarse reventa, es decir, artículos adquiridos a muy bajo coste que se venden a bajo coste o a coste quintuplicado. Hace dos años, a razón de robo de clientes a los comercios de la zona, los artesanos son relegados a la acera intransitada de detrás de las pizzerías. Si antes frío, ahora frío y nadie. La indignación, el sentirse manipulados, enciende la mecha, la gota colma el vaso, la rabia empuja a la lucha. Y se hicieron escuchar, uno y otro día, tras uno y otro desplante, y se unieron más para ser la Asociación Artesanos del Bierzo.