Cáritas auxilió a más de 200 inmigrantes en su primer año en Cacabelos
Cáritas de Cacabelos prestó ayuda a más de 200 inmigrantes durante su primer año de vida. La organización ofreció alimentos y ropas e inició un curso de castellano para extranjeros. Su reto para este año 2005 pasa por abrir un comedor para temporeros, según adelantó el párroco de Cacabelos, Jesús Álvarez. La principal tarea a las que se dedicaron los voluntarios, en colaboración con la parroquia, durante los últimos meses, fue ofrecer ayuda de urgencia a inmigrantes y familias de la zona con escasos recursos. A través de sus programas, «El ropero parroquial» y «Banco de Alimentos» se han recogido cientos de prendas y víveres, donados por vecinos del municipio y Ayuntamientos limítrofes y que han sido distribuidos entre las familias más desfavorecidas. Además, se impartió un curso de español ante la avalancha de inmigrantes que llegaron al municipio durante la temporada de recogida de frutas, en respuesta a la llamada del Ayuntamiento, que abrió un albergue de temporeros. El principal reto de Cáritas-Cacabelos para 2005 es poner en marcha un comedor, para ofrecer un plato caliente a todos los extranjeros que acudan a la villa a trabajar. De hecho, presentarán la iniciativa ante el Ayuntamiento que ya ofrece, desde hace dos años, un lugar dónde estos temporeros puedan dormir. Se pretende cobrar un precio módico que les permita disfrutar de cama y comida caliente, cada día. El colectivo también ayudó, este año, a tres familias inmigrantes con problemas de estructuración.