El PB alaba el nuevo centro, pero pide al Ayuntamiento respaldo al comercio

El Partido del Bierzo (PB) enfocó ayer con una doble perspectiva la llegada del nuevo centro comercial y de ocio que se instalará en La Rosaleda. De un lado, los bercianistas se mostraron satisfechos por el desarrollo en Ponferrada de este proyecto, que generará una inversión de 110 millones de euros y más de un millar de empleos. «Con este nuevo centro comercial está claro que Ponferrada se situará a la cabeza de la comunidad en el sector servicios», reconoció el nuevo vicepresidente del partido para el área de Ponferrada, Fernando Valcarce. «Poner de manifiesto -añadió- la situación estratégica de Ponferrada y la cecesidad de que las instituciones apuesten por las inversiones y más si estas son generadoras de empleo directo». Pero dicho esto, los bercianistas exigen al grupo de gobierno del PP que tome las riendas de hacer competitivo al comercio local. Valcarce habla de dos años, hasta la apertura del centro de Sonae, para promover ya «cursos dirigidos a los comerciantes locales, instándoles a la especialización, a la modernización y también al asociacionismo». El PB considera que con medidas de apoyo de este signo se evitará que los propietarios de negocios en la ciudad se puedan ver afectados por el complejo de La Rosaleda. «No es el momento de pataleos», significó Valcarce, «sino de amortiguar en los máximo los posibles efectos negativos que este centro tenga sobre el comercio local».