La Cantina de Martín Moro en Colinas

La cantina surgió como un sueño, Mª Jesús, su copropietaria, trató de trasladar todos los conocimientos de sus vivencias, adquiridas durante años deambulando por el mundo. Comenzó invitando a sus amigos a conocer el lugar mágico de Colinas de Martín Moro, y terminó sin darse cuenta, cocinando para foráneos y lugareños. En la carta no se encuentran platos exóticos sino, tal y como dice Mª Jesús « son recetas tradicionales de mi madre y mi abuela, que se han contagiado de lecturas y viajes». Quizá el plato más exótico sea el pato, el resto son productos de siempre, cabrito, ternera, queso de cabra , bacalao y frutos del campo. Los platos con más demanda son siempre el queso de cabra sobre cebolla confitada y ensalada, el Stroganof , el bacalao y el helado de queso. Toda la familia se ha interesado por la cocina al principio como entretenimiento y ahora como oficio, lo que llega a la mesa es un trabajo de un equipo de mujeres., «ni cocinamos, ni servimos aquello que nosotros no comeríamos, con plena satisfacción, tratamos de cuidar la presentación y que el servicio sea afable». Aunque es un lugar para iniciados, y no se da a conocer con la participación en jornadas, sus clientes son habituales, gente de diversa procedencia que repite. Lo más sorprendente de la cantina es su localización al lado de un río, su decoración cuidada y la versatilidad de sus menús, existen variaciones especiales para vegetarianos y niños, que despiertan las envidias de los más adultos.