Diario de León

El propósito de López Riesco es convertir la zona en una gran Aula de la Naturaleza

El alcalde de Ponferrada plantea abrir un servicio de hostelería en el Pajariel Vandalismo con la señalización turística del Consejo

Antes de tomar cualquier tipo de actuación se esperará a las conclusiones del Plan Director

L. DE LA MATA

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Miguel Ángel Tranca - ponferrada
Ponferrada

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El alcalde de Ponferrada, Carlos López Riesco, aboga por construir en el Pajariel una cafetería-restaurante en la que, además de degustar la gastronomía berciana, se pudiera también disfrutar de sus vistas, extensivas hasta la misma ciudad. Esta iniciativa viene a complementar la pretensión del regidor en convertir la zona en un gran Aula de la Naturaleza en la que estuvieran presentes todas las especies arbóreas de la zona. La propuesta del regidor supondría la adecuación de varios caminos y senderos a la vez que la colocación de señales de todo tipo en las que se informaría al visitante no sólo de las peculiaridades de la flora sino de las zonas a visitar. Con todo, el Ayuntamiento de Ponferrada esperará a las conclusiones que emanen del Plan Director de la zona con el fin de acometer con posterioridad estas iniciativas y otras muchas que según el alcalde deben redundar en el bien del paraje y su supervivencia como tal. López Riesco tendió también la mano a los otros partidos políticos bercianos así como a las partes implicadas con el fin de poder alcanzar un consenso que agilice buena parte de estas iniciativas. La señalización turística colocada por el Consejo Comarcal sufrió días atrás la agresión de los vándalos. Cuatro balizas rotas y otras tantas desaparecidas ubicadas en el término municipal de Ponferrada en el tramo que va de Toral de Merayo a San Andrés fue el «botín» de ciertos enemigos del esfuerzo ajeno que aprovecharon la impunidad propia del que hace las cosas sin que le vean para destruir unas señales que se extienden a lo largo y ancho de toda la comarca berciana y cuya inversión por parte del Consejo Comarcal supuso en su día 300.000 euros. Ahora toca restaurarlas e indagar quienes fueron sus autores.

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