Diario de León

Matesanz asegura que España es el país donde hay más posibilidades de recibir un trasplante

Un mensaje de Zapatero recuerda en la gala su compromiso con León

Del Olmo nombró a Rato cofrade del Botillo para cerrar la entrega de premios en Ponferrada Los

Rato recibió la capa de la cofradía del Botillo de manos de Luis del Olmo

Rato recibió la capa de la cofradía del Botillo de manos de Luis del Olmo

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Carlos Fidalgo - ponferrada
Ponferrada

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«Obligaciones ineludibles» impidieron al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, recoger en Ponferrada el premio Micrófono de Oro extraordinario concedido por la Federación de Asociaciones de Radio y Televisión. El presidente justificó su ya prevista ausencia de la gala celebrada en el pabellón del Toralín hasta las primeras horas de la madrugada de ayer mediante un telegrama. Y fue su hermano, el abogado Juan Rodríguez Zapatero quien recogió el galardón que cerró la noche en el Toralín de manos de Luis del Olmo y recordó a los presentes -1.700 invitados, con rostros conocidos del mundo de la política, la empresa y el espectáculo- el compromiso del presidente del Gobierno con su tierra. «Tiene presente León, esa gente, esa tierra y esos amigos», afirmó Juan Rodríguez después de que Luis del Olmo leyera el telegrama donde Zapatero no dejó de alabar el «papel esencial» que comunicadores como el locutor ponferradino, artífice de que la gala se celebre en el Bierzo, desempeñan «para que nuestra sociedad sea más democrática y transparente». Rodrigo Rato había ocupado el escenario minutos antes que el hermano de Zapatero para recoger el otro Micrófono de Oro extraordinario. El director del Fondo Monetario Internacional viajó desde Nueva York y elogió la categoría de un premio que valoró más por recibirlo de las manos del comunicador ponferradino y en su ciudad natal. La gala y los premios fueron para Rato «una muestra de capacidad» y «un motivo de orgullo para Ponferrada». Rato, encapotado El presidente del FMI, al igual que la copresentadora de la gala, la televisiva Paula Vázquez, terminó la noche encapotado. Y es que Del Olmo no perdió la oportunidad de hacer patria y no dejó de entregarles, como ya es habitual, las capas que les acreditan como miembros de la Cofradía del Botillo. La sombra de la muerte del Papa se dejó notar en el transcurso de la gala, tras conocerse en torno a las diez de la noche la noticia del fallecimiento del Pontífice y guardarse un respetuoso minuto de silencio. Pero quizás el momento más emotivos de la noche, sin embargo, llegó con la entrega del Micrófono de Oro en el apartado de instituciones, que recogió el responsable de la Organización Nacional de Trasplantes, Rafael Matesanz. Fue la modelo Sandra Ybarra, que por dos veces ha superado un cáncer con sendos transplantes de médula quién se lo entregó. «Gracias a organizaciones como esta yo puedo estar aquí esta noche», manifestó emocionada. Rafael Matesanz alabó el funcionamiento de un sistema de salud «a veces vilipendiado», pero que ha conseguido «que un español sea la persona de todo el mundo que tiene más posibilidades de conseguir un trasplante y en un sistema público sin posibilidad de discriminación por motivos sociales o económicos».

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