La administración ha destinado medio millón de sus fondos y 1,7 millones del Plan del Carbón
La Junta ha invertido 2,2 millones en restaurar 24 minas abandonadas
Igüeña, con once, y Torre del Bierzo, con ocho, acaparan las actuaciones de los últimos cuatro años
Imagen de la escombrera, nunca restaurada, de la vieja explotación del Coto Wagner, en Onamio
Recuperar las zonas degradas por explotaciones mineras abandonadas tiene un coste; 2,2 millones de euros en los últimos cuatro años. Ésta es la cantidad que la Dirección General de Minas y Energías de la Junta de Castilla y León ha destinado a la restauración de 24 escombreras, fundamentalmente, en el Bierzo. La comarca ha recibido el 50% de los fondos aportados por la administración autonómica, bien de sus propios presupuestos, o bien del Plan del Carbón. La Junta, que inició sus actuaciones en el Bierzo el año 2002, destinó hasta el pasado año medio millón de sus fondos propios para recuperar hasta 16 zonas degradadas en el Bierzo, con proyectos de restauración que rara vez superaban los 30.000 euros. La cantidad recibida para actuar en la comarca no ha pasado del 25 por ciento de los fondos propios invertidos por el Gobierno regional. Las cifras han mejorado con la aportación de dinero del Plan del Carbón. De los 2,6 millones de euros procedentes del Gobierno central invertidos en toda la comunidad, el Bierzo se ha llevado 1,7 millones de euros en tres años. Sólo en lo que va de año, la Junta ha canalizado a la comarca hasta un millón de euros para cinco proyectos de restauración medioambiental -fuera de la comarca no ha actuado- que superan en todos los casos los 150.000 euros de coste. El Bierzo Alto, muy degradado La mayor parte de minas abandonadas con zonas degradadas se sitúa en el Bierzo Alto, cuenca ha acaparado la mayor parte de las actuaciones emprendidas en la comarca desde el año 2002. Sólo en el municipio de Igüeña, la Junta ha tenido que intervenir en once antiguas explotaciones, y en ocho más situadas en el municipio de Torre del Bierzo. En Noceda, también ha sido necesario restaurar una vieja explotación minera. La administración autonómica también ha actuado en tres antiguas explotaciones de Toreno y tan sólo en una situada en la cuenca Fabero-Sil. La Dirección General de Minas no ha podido facilitar, sin embargo, un censo con las escombreras y sobre todo con los cielos abiertos abandonados, en su mayor parte de pequeñas dimensiones, que aún deberían restaurarse. Un estudio editado el pasado año por la propia Junta y por la Fundación Biodiversidad estimaba que sólo en el Bierzo Alto se han explotado 400 cielos abiertos en treinta años. Uno de los autores del análisis, Alfonso Fernández, calcula que las empresas sólo ha restaurado el 10% de las cortas abiertas desde 1974.