La cultura del vino en el Boca y Mantel

Surgió hace ocho años con los primeros indicios de la cultura del vino en Ponferrada, su propietario era un inquieto empresario del mundo del vino, la oferta de vinos no era tan amplia como la que Jael Ramos y su hermana Natalia han elaborado con inquietud y buen criterio. Jael Ramos trabajó en su día para el antiguo propietario y decidió mantener el negocio y aumentar la oferta de vino, con gamas altas y representaciones de todo el mundo, de España, Australia, Argentina, California, Francia e Italia, una gran colección de marcas pensadas para todos los gustos y bolsillos, el más caro L' Ermita de Álvaro Palacios, trescientos euros, cuya botella exhiben orgullosas sus propietarias. Su clientela es variada, desde clientes que siguen fieles a gustos clásicos hasta jóvenes de treinta años, más dispuestos a probar nuevas elaboraciones. Para el chateo los bierzos actuales son los que más se consumen, marcas como Peique, Castroventosa o Tilenus, adornan en abundancia las estanterías . Para Natalia la dificultad del negocio reside en «el conocer los vinos es lo más complicado de este negocio, porque no siempre lo más conocido o lo que a ti te gusta es lo que le gusta a la clientela, aunque normalmente la gente se deja aconsejar». Con una copa de un buen vino, también buenas tapas: tostas de Veigadarte con cebolla confitada, paté de jabugo con manzana frita, ensalada codorniz con piñones y embutidos; el plato estrella es el foie de pato a la plancha y el jamón de pato con foie.