El colectivo se considera desmotivado por eliminarles funciones
Los profesores vaticinan el fracaso de la LOE por no primar el esfuerzo
La asociación de educadores cree que la ley socialista será «otra oportunidad perdida»
El presidente de la Asociación de Profesores de Enseñanza Secundaria de Castilla y León, Honorio Vega, y el responsable del colectivo para la provincia de León, Manuel Prior, hicieron ayer en Ponferrada un análisis pesimista sobre el anteproyecto de la Ley Orgánica de Educación (LOE), presentado por el Ministerio. El colectivo vaticinó el fracaso de esta nueva ley por numerosas razones, y una de ellas es que, a su juicio, no se prima el esfuerzo del alumno y se desmotiva al profesorado. La asociación de profesores critica el hecho de que no se reduce la ratio de alumnado por clase en la etapa más conflictiva de la educación, la ESO. Tampoco resuelve el problema de la diversidad en el aula. Vega incidió en que no sólo no aborda la desmotivación del profesorado, sino que incluso se acusa a este colectivo del fracaso educativo. Además, dicen que la LOE aumentará notablemente las funciones burocráticas y todo ello bajo el mandato del principio de colaboración, «la sumisión». Otro de los aspectos que entienden es muy negativo para la educación es que se potencia al profesor generalista, en lugar de al especialista, y prorroga muy poco el plazo para la jubilación anticipada voluntaria. También estiman que el anteproyecto apuesta por la enseñanza concertada en detrimento de la pública, citando la homologación retribuida, sin exigir las mismas condiciones de acceso y movilidad, o el aumento del coste económico del módulo cuando asuman alumnos con apoyo educativo especial. Indican que la LOE vuelve de facto a la promoción automática, eliminan los exámenes de septiembre y se retrocede en el modelo de dirección, al tiempo que deja fuera a los profesores en la toma de decisiones en el funcionamiento y gobierno de los centros, favoreciendo a los padres y alumnos. «La LOE es otra oportunidad perdida», resumía Honorio Vega.