La estrella de la Escuela de Cine que más brilla
Una joven de Molina, Angus Arias, participa ya a sus veinticuatro años en la producción de un importante proyecto cinematográfico
Angus Arias disfrutó con su perro de unos días de descanso en Molina
No le dio tiempo ni siquiera a terminar el curso en la Escuela de Cine. Le quedaba una semana de clases cuando Ray García, conocido por su dirección de la serie «Al salir de clase», la reclamó para formar parte del equipo de producción de la nueva película que dirige, Cubalibre, y que se estrenará en septiembre. Es Angustias Arias, uno de los currículos más destacados que ha dado la escuela de cine del campus berciano. Ray García la conoció por el trabajo que ella había hecho con el guión de su película en una asignatura de la carrera. «Vino a la facultad a darnos una charla sobre ayudantía de dirección, debió de caer en sus manos algo que yo había hecho y al parecer le gustó, porque llamó a la escuela para ponerse en contacto conmigo». «Tuve muchísima suerte», comenta Angus, como ella prefiere que le llamen, puesto que se trata de un largometraje protagonizado por José Luis López Vázquez y en el que comparten cartel profesionales como Kira Miró, Sergio Villoldo y Daniel Huarte. El trabajo que está realizando es un meritoriaje, que es el primer eslabón de la cadena de producción en el cine. Se trata, según ella explica, «de participar en el trabajo de todos los puestos, para que vean cómo te mueves». Antes, comenta Angus, «el meritorio era el de los cafés, y yo no he tenido que poner ningún café». La más joven del equipo, con 24 años, considera que las prácticas que ha realizado en la facultad le han servido de mucho. «Yo no sabía nada de cine hasta que entré en la escuela y ahora no me va tan mal». Además, compara su formación práctica con la de sus compañeros de equipo que han terminado recientemente su carrera y asegura que la escuela berciana es pionera en la realización de trabajo práctico con los alumnos. «Nosotros hemos trabajado con cámaras de cine y con alta definición, mientras que ellos sólo han hecho el típico corto que ahorras tu para sacarlo adelante». El mundo de la producción cinematográfica es complicado, pero Angus afirma que su máxima expectativa es poder vivir de él, «que sea este trabajo el que me dé de comer y el que me de independencia, ése es el sueño de todos en la escuela». Este parece un buen ejemplo de que las cosas en la Escuela de Cine se están haciendo bien. Sólo falta tiempo, para que sean muchos alumnos más los que puedan dar un salto así al mundo profesional.