«Los accidentes no son fortuitos, esta sangría no puede continuar»

Será necesario esperar al menos dos semanas para conocer las conclusiones de la investigación del accidente en el que Manuel Ucha perdió la vida cuando reparaba una pala mecánica para cargar escombros, según las estimaciones de CC.OO, que presidente el comité de empresa de Antracitas de Brañuelas. Con todo, el responsable de la sección minera de CC.OO en el Bierzo Alto se mostró ayer beligerante con los informes sobre accidentes que vienen elaborando las empresas y la Junta de Castilla y León. «Nunca tenemos los mismos puntos de vista», afirmó. Manuel Ángel Rey insistió en que cuando se produce un accidente laboral «siempre hay una negligencia de la empresa, aunque el error lo haya cometido el trabajador, porque la empresa es la primera responsable de que se respeten las condiciones de seguridad y si es necesario de cambiar los hábitos de trabajo que pongan en riesgo a sus trabajadores». Rey hizo un llamamiento a las empresas mineras y a la administración «para que pongan más énfasis» en las condiciones de seguridad. «Luego todavía tendrán la osadía de decir que los accidentes son fortuitos, cuando ninguno lo es. Esta sangría no puede seguir», alertó. Manuel Ucha, de 47 años, casado y con dos hijos, resultó atrapado por el contrapeso de la pala mecánica, en el interior del pozo.