La inauguración del puente del ferrocarril pone fin a los atascos

Ponferrada estrenó de nuevo ayer el remozado puente del ferrocarril, permitiendo así la conexión directa peatonal entre la avenida de España y la glorieta del Templario, y el tráfico rodado hasta la intersección de las avenidas del Castillo. De esta forma se pone fin al embotellamiento de vehículos que durante el tiempo que han durado las obras de restauración se producía en la avenida de Los Escritores y en las principales conexiones de la parte baja y alta de la ciudad, especialmente en días de mercado y en horas punta. A la inauguración asistía el alcalde, el popular Carlos López Riesco, con los concejales de Urbanismo y Fomento, que eran recibidos por un grupo de jubilados con aplausos. Con la obra rematada ayer se concluye la remodelación al completo de la avenida de España, desde el Templario a la calle Marcelo Macías. En toda esta urbanización se han invertido 1.039.000 euros, de los que 173.000 corresponden al modificado y nuevo mobiliario urbano del puente. El alcalde recordó que la obra fue lenta debido a las dificultades para poder trabajar, puesto que la adjudicataria sólo podía emplear cuatro horas al día, debido a que la línea eléctrica de Renfe tenía que permanecer en tensión para permitir el paso de trenes. «Las obras han sido complicadas, porque se han hecho manteniendo todo el tráfico ferroviario», explicaba Riesco. Desde el Ayuntamiento se destacaba la alta calidad y singularidad de este nuevo paso sobre el ferrocarril. «Es un puente con cierta personalidad, puesto que es un puente que ha significado mucho para Ponferrada, puesto que fue la conexión donde a finales del siglo pasado la implantación del ferrocarril aquí supusiera el despegue definitivo de nuestra ciudad, y de alguna manera es un punto muy céntrico que enlaza la plaza de Lazúrtegui con la avenida de España y el Caballero Templario, y nos parecía que la intervención debía de ser del agrado de todos los habitantes», destacó el alcalde Riesco.