En buena dirección

EN UNA cultura en la que ser director importa más que nada. Así nos va, que hay más jefes que subordinados. No es fácil ser director de algo, en este caso Provincial de Educación, sin que los efluvios de la vanidad, la soberbia y el nepotismo afloren en el ocupante del cargo. Los que habitamos en la singular comarca de El Bierzo estamos o deberíamos estarlo, agradecidos con la actual Dirección Provincial de Educación. Ahora perteneciente a la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León por mor de la transferencia habida de la Administración Central hacia la Regional. El director provincial de Educación venía a ser un gobernador civil en asuntos de infraestructura y recursos humanos docentes. Muchas veces, manu militari, otras manu política, y casi ninguna manu magíster, que es lo que tenía que haber sido siempre. El actual director provincial, Emilio Gutiérrez. Al bricias, al fin un especialista en el cargo. Está sabiendo conjugar el cargo político con la corresponsabilidad pedagógica. Eso a pesar de los siempre combativos sindicatos de todo pelaje y color político. En el Bierzo, se ha dado salida consensuada a la difícil cuestión del gallego en escuelas e institutos. Quien quiere de forma voluntaria lo estudia. Cada vez más. Dinero y personal se han habilitado para ello. Ahora nos sorprenden con un ambicioso plan para dar a conocer nuestro principal patrimonio monumental, esto es, Las Médulas, a toda Castilla y León. Y qué mejor que llevar a medio millón de alumnos, de niños, a una serie de clases in situ. Sacarles del aula y traerlos a la mayor mina aurífera que jamás haya existido en la península ibérica. Otro acierto. Es verdad que este último, no será posible sin la colaboración de múltiples instituciones. Pero créanme, movilizar a casi medio millón de castellano y leonesines con sus profes, darles material e infrestructura, elevar el listón pedagógico, etcétera no es tarea fácil. Incluso en Ponferrada, se ha conseguido que en vez de la Junta, sea el Ayuntamiento el que se haga cargo de la mayor parte del peso político y económico de proyectos de mejoras de infraestructuras en colegios. Abiertos quedan aún, el definitivo espaldarazo al Campus del Bierzo en Ponferrada una vez hecho lo más difícil, es decir, crearlo, y una mayor racionalización del mapa de colegios por criterios poblacionales y sobre todo y ante todo un mejor mantenimiento de las instalaciones. Tiempo al tiempo.