La muestra debe servir para restaurar el patrimonio que ya está en el Bierzo

Uno de los dilemas que han surgido desde que Ponferrada se proclamara sede de las Edades del Hombre en 2007 es el de las piezas que compongan la exposición. El mayordomo de la Cofradía ponferradina de Jesús Nazareno, Fernando Frá, apuesta por una muestra singular que no busque tanto las grandes piezas, como el Edicto de Augusto, el Cáliz o la Patena de Peñalba, estas dos últimas formando parte de la colección del Louvre de París, sino que propone una muestra en la que se busque la singularidad como referente y en la que se de relevancia a la iconografía albergada en las iglesias de la comarca del Bierzo. «No es cuestión de repetir las piezas de otras exposiciones, en las iglesias del Bierzo hay una gran riqueza iconográfica que se puede restaurar para la ocasión, lo que puede dar a las Edades del Hombre de Ponferrada un carácter muy singular que la destaque de las anteriores exposiciones». El mayordomo resaltó las muchas imágenes románicas distribuidas por el patrimonio cultural y religioso del Bierzo y apuntó también la posibilidad de rescatar la bandera original de la villa de Ponferrada, que en la actualidad está en el Museo del Ejército de Madrid. Además, Frá recuerda que el año siguiente a la celebración de las Edades, el 2008, es el año en que se celebra el cincuentenario de la coronación de la Virgen de la Encina y de la proclamación de Ponferrada como ciudad, por lo que apuesta por una temática de la exposición que no se centre sólo en el Camino de Santiago o en el Castillo, sino que contemple también este aspecto.