| Reportaje | El ascensor más querido |
El viajero diez millones
Al cumplir ahora dos años instalado, el elevador que une la avenida General Vives con la calle Felipe Herce se ha convertido en uno de los servicios públicos más utilizados por los ciudadanos de Ponferrada
Se acaba de cumplir el segundo aniversario del ascensor que une la parte baja y la parte alta de Ponferrada y las cifras de usuarios no han dejado de aumentar. Si en 2004 este servicio público alcanzaba los cinco millones de usuarios, un año después el número lejos de descender se ha duplicando. Desde su nacimiento en 2003, han sido diez los millones de personas que han utilizado el ascensor que une la calle General Vives con Felipe Herce, convirtiéndolo en una de las infraestructuras públicas con mayor éxito de la ciudad. El ascensor, que permanece abierto entre las 7.30 y las 00.30 horas, realiza entre 700 y 800 viajes de subida y bajada diarios en los que transporta a cerca de 14.00 viajeros. Una afluencia de ciudadanos que provoca que a ciertas horas del día se registren colas de espera en ambas direcciones. Las personas que más utilizan este servicio son aquellas para las que estaba proyectada su construcción: ancianos, discapacitados, amas de casa que llevan la compra del mercado y padres y madres con carritos de niños y niños con bicicletas. Dos años después de su inauguración, el ascensor de General Vives ha convertido a la calle Felipe Herce en uno de los principales accesos a la calle Ancha y ha logrado vencer la principal barrera arquitectónica que dividía las zonas alta y baja de Ponferrada.