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El lunes se encontraban sólo pendientes de ingreso 20 pacientes, y ayer eran todavía 16

El personal denuncia un nuevo tapón en el servicio de urgencias del hospital

Los sindicatos creen que pese al esfuerzo de los profesionales la calidad asistencial se está resintiendo

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R. Arias - ponferrada
Ponferrada

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Los sindicatos que representan a los trabajadores del Hospital del Bierzo, en Ponferrada, volvieron a lanzar ayer la voz de alarma sobre la situación de colapso que soporta el servicio de urgencias del centro asistencial de Fuentesnuevas. Las centrales UGT, CC.OO., CSI-Csif, SAE y Cemsatse suscribieron un comunicado conjunto en el que catalogan como «alarmante» la situación que se ha vuelto a reproducir en el mencionado departamento. Y lo que es más grave para los usuarios de la sanidad pública, admiten que el tapón en el servicio puede repercutir en la calidad asistencial que se presta. La denuncia de los portavoces del personal se produce después de que el pasado lunes, sólo en el turno de la mañana, se acumulasen más de 20 personas pendientes de un ingreso. En este cupo no se incluyen los enfermos que no acaban ingresando tras la preceptiva consulta. El martes la aglomeración era similar, y ayer miércoles a última hora de la mañana todavía quedaban 16 pacientes pendientes de su ingreso en el principal complejo sanitario de la comarca berciana. «Teniendo en cuenta que este servicio está abierto veinticuatro horas, el atasco llega a ser en ocasiones continuo y las condiciones de calidad asistencial no son las más óptimas a pesar -matizan los sindicatos- del esfuerzo realizado por los profesionales». En esta crítica coyuntura, que se reedita con más frecuencia de la deseable, los sindicatos consideran que las medidas que hasta ahora se han venido adoptando desde la gerencia para paliar el problema se revelan como insuficientes. En este sentido, los denunciantes reconocer que el personal médico y de enfermería del área de urgencias se encuentra «desbordado». «No es difícil adivinar la situación en la que se encuentra este servicio tanto para los usuarios que a menudo están situados en lugares que no están habilitados para ellos, como para los profesionales que desarrollan su trabajo», subrayaron los interlocutores de la plantilla. «La situación», enfatizaron», es insostenible y estresante para todos los colectivos profesionales del servicio de urgencias». Precisamente el lunes, la Junta de Castilla y León anunció la adjudicación de la redacción del proyecto de ampliación de urgencias. En un mes, el diseño de la reforma de la planta actual, que sólo tiene una capacidad para 14 pacientes, y la edificación de una nueva con una superficie de casi 900 metros, debería estar concluido. Luego aún deben contratarse las obras. «Las condiciones de calidad asistencial no son las más óptimas pese al esfuerzo realizado por los profesionales» SINDICATOS SANITARIOS

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