El río Boeza

LOS CALORES del verano tardío han evidenciado que desde Catoute a San Miguel hay una distancia casi infinita en cuanto a la calidad de las aguas. Hay que reconocer que cuando el Boeza entrega caudal al Sil, sus aguas no tienen la misma calidad que las del gran río que lleva el agua, cuando rinde tributo y pierde el nombre ante el Miño en los Peares. La contaminación del río Boeza en su tramo medio-bajo, ha merecido la atención del Procurador del Común, por el potencial peligro para la salud pública que supone la falta de depuración de las aguas urbanas de Bembibre. Aunque parezca mentira, se trata de la misma Institución que se declaró incompetente cuando mil quinientos usuarios de la carretera Toreno-Pobladura de las Regueras alertaron sobre los riesgos para la vida de las personas y la preservación del medio rural y su futuro, que alimenta el trazado de la misma por el interior de las poblaciones. Equivocándose entonces, optó por la presunción de acierto de las administraciones a la hora de definir sus proyectos y prioridades. Acertando después el Procurador del Común, pone en cuestión una política de prioridades que coloca lo necesario detrás de lo folclórico-gastronómico, justas y mercadillos y otras actividades también respetables. Después de tantos años de Fondos Miner, lo más urgente está en anteproyecto, la salubridad de las aguas del Bierzo Alto, que también es Bierzo, y zona minera, está en la picota pues el tramo de contaminación entre Bembibre y San Miguel afecta a todo el sistema hídrico de la subcomarca, castigada por el despoblamiento subsiguiente al cierre de las minas, mientras con Fondos Miner se han restaurado catedrales y diseñado cafeterías de lujo y otros proyectos en ayuntamientos no mineros. El tirón de orejas que ha dado el Procurador del Común alcanza también al ayuntamiento de Congosto, que mira para otro lado, posición acorde con su laxitud en temas medio ambientales, apostando por industrias contaminantes como lo haría cualquier administración del tercer mundo, en un territorio donde niveles de contaminación inasumibles lesionan la cadena vital. Pregunta el Procurador del Común si Bembibre y Congosto están adoptando alguna iniciativa, en su ámbito de competencia de defensa de la salud de las personas, para atenuar el problema de la contaminación de las aguas. He ahí una buena pregunta. También la confederación hidrográfica del norte y la Junta tienen algo que decir y que hacer en el ámbito de sus respectivas responsabilidades.