Ocho hosteleros invertirán un millón de euros en una discoteca en Ponferrada El café Cohiba cierra por demolición del edificio

Una sociedad formada por ocho hosteleros de Ponferrada y Cádiz están realizando un proyecto que conlleva una inversión de cerca de un millón de euros para la realización de una gran discoteca en la zona del Puente Boeza, en Ponferrada. El proyecto prevé la ubicación de la sala de ocio en la finca que hace algunos años ocupaba la conocida discoteca Parchis, un terreno de 14.000 metros en el que se instalará la nueva «Oxi Ponferrada», como así se llamará la macro discoteca. Serán 1.300 metros cuadrados de sala, con una terraza de 800 metros cuadrados en la que habrá una piscina, toda una novedad en la capital del Bierzo. En el interior, tres pistas diferenciarán los distintos tipos de ambientes, entre los que cabe citar una zona de música disco o house, una zona de chill out y una pista de salsa y éxitos del momento. La iniciativa parte de una sociedad formada por los propietarios del Café Cohiba, que próximamente cerrará sus puertas en Ponferrada, los del pub Budda y los responsables de una discoteca en el Puerto de Santa María, en Cádiz. Este grupo de empresarios, tienen, además de la discoteca de Ponferrada, un proyecto para la construcción de una sala de las mismas características en Jerez de la Frontera. El proyecto pretende estar listo para realizar su inauguración en los días previos a las fiestas navideñas, aprovechando que en esas fechas hay gran afluencia de público en los pubs y salas de fiestas. La discoteca, que supone un proyecto de alta inversión, será a su vez una fuente de empleo, ya que según algunos de los socios indican, prevén que los días de más afluencia de gente, como son los sábados, puedan trabajar unas veinticinco personas. Próximamente el edificio en el que está situado el Café Cohiba, en la esquina entre la Avenida de Valdés y la Calle Doctor Fleming, en el centro de Ponferrada, será derrivado. Por este motivo, unos de los pubs con más público de la ciudad se verá obligado a cerrar sus puertas, después de cinco años desde que se inaugurara. La directiva del local, como agradecimiento a la fidelidad de su clientela de cada noche desde que abriera, celebrará mañana domingo a partir de las 22.00 horas, una fiesta de despedida. Sus propietarios prevén recuperar en los próximos años, en otro local, el espíritu de este café que ahora se va.