Tributo en Villalibre a un cura fallecido hace medio siglo
El homenaje fue impulsado por el empresario Manuel Cobo, cuyo deseo personal de rendir tributo a un amigo y consejero se cumplió ayer en presencia de medio centenar de personas
El empresario Manuel Cobo se mostró muy emocionado durante la bendición del panteón del párroco
EL pueblo de Villalibre, perteneciente al municipio de Priaranza del Bierzo, celebró ayer un emotivo homenaje a quien fuese su párroco, José Regueras Morán, fallecido en noviembre de 1957. El acto fue impulsado por el empresario Manuel Cobo Calleja, quien costeó los gastos del nuevo panteón en el que reposan los restos mortales del sacerdote. Manuel Cobo, amigo de José Regueras desde que comenzó a ser monaguillo a los siete años, se mostró en todo momento muy emocionado y confesó que con la celebración de este acto cumplía un sueño personal que venía persiguiendo desde hace veinte años. Los actos en memoria del párroco de Villalibre comenzaron con una misa oficiada a las 12.00 horas, a continuación alrededor de medio centenar de personas se desplazaron hasta el nuevo cementerio del pueblo para presenciar la bendición del panteón del párroco. Entre los asistentes se encontraban familiares y amigos del sacerdote así como el párroco de la basílica de la Encina, Antolín. Tras la bendición de la lápida, la compañera de Manuel Cobo, leyó un escrito en el que, en nombre del empresario, mostró su agradecimiento al párroco que con «sus enseñanzas y consejos marcó el futuro de aquellos jóvenes que iniciaban su andadura por el mundo». Manuel Cobo declaró que José Regueras fue para él «un gran amigo», además de profesor y consejero, guiándole sus primeros pasos en el mundo empresarial. Después del acto de homenaje en el panteón los asistentes disfrutaron de un vino español.