En el año 2003 fue elegido para decorar el interior de La Almudena en la boda del príncipe Felipe
El Obispado ofrece a Ignacio Vicens el diseño de la iglesia de La Rosaleda
La diócesis confía en su experiencia y calidad para una obra presupuestada en 1,5 millones
La Diócesis de Astorga ha elegido a Ignacio Vicens como el arquitecto encargado de elaborar el proyecto y posteriormente dirigir la construcción de la iglesia parroquial de La Rosaleda. Aunque la decisión final será del propio Vicens, desde el Obispado se ha confiado en una persona con experiencia y con un currículum notable para convertir en realidad un proyecto que rondará el millón y medio de euros. Autor de la decoración interior de la catedral de La Almudena para la boda de los Príncipes, del edificio de la Facultad de Comunicación en la Universidad de Navarra o del futuro Centro de la Cultura de Madrid, Vicens cuenta en su haber con un buen número de reconocimientos nacionales e internacionales, circunstancia que le ha convertido en un referente cuando de arquitectura se habla. Ahora, una vez acepte el ofrecimiento de la diócesis astorgana, tendrá como reto levantar un templo religioso en el que la originalidad será un elemento a tener en cuenta. Precisamente el arquitecto ya ha recibido en su casa los proyectos premiados en el concurso de ideas que en su día convocó el Obispado así como las directrices que deben estar presentes en la edificación. Entre ellas destaca la obligatoriedad de que el templo disponga de un aforo para 500 personas. Esta zona se complementará con un pórtico y con el resto de elementos propios de un edificio religioso como la sacristía y sendas capillas, una de diario-oratorio y otra penitencial. En una segunda zona, denominada de dependencias, se ubicarán las áreas relacionadas con las salas de reuniones y aulas y las salas de cursos. La idea es que, una vez que Vicens se haga cargo de la dirección del proyecto, en un plazo de unos meses este haya sido elaborado y, a lo largo de la primavera del 2006, comiencen los trabajos de construcción. Antes, la diócesis licitará una obra que permitirá a la ciudad contar con una nueva iglesia parroquial más cuyo titular será Máximo Álvarez, hasta hace unos meses titular en la cuenca minera de Fabero, a la que había sido destinado hace 28 años. La nueva parroquia ponferradina ubicada en el barrio de La Rosaleda contará con más de mil metros cuadrados de suelo en los que se pretende levantar un templo acorde con los nuevos tiempos en materia de infraestructuras y uso. Para ello, el Obispado ha establecido una serie de directrices que deben ser ejecutadas de manera clara para que tanto el culto como otra serie de actividades puedan desarrollarse en toda su plenitud. Y nada mejor que para llevarlo a cabo, que un arquitecto de al solvencia de Ignacio Vicens cambie la imagen que actualmente presenta el solar por la de un templo lleno de significación.